De forma gradual, el Ministerio de Defensa aumentará el pie de fuerza para el Chocó, dentro del denominado ‘Plan 16.000’, que contempla la incorporación este año de 11.000 soldados, en 2025, 4.500 y en 2026 los 500 finales.
Así se decidió en el consejo de seguridad que se adelantó en Quibdó, presidido por el ministro de Defensa, Iván Velásquez Gómez, y la presencia de la gobernadora del departamento, Nubia Carolina Córdoba, el alcalde de Quibdó, Rafael Andrés Bolaños Pino y 10 alcaldes del departamento del Chocó.
Con respecto a la Policía Nacional, se anunció el cumplimiento del Plan 20.000, que significa incrementar en este número los hombres y mujeres de la institución para garantizar la seguridad y que se espera culminar este año.
En el consejo se tocaron, además del aumento del pie de fuerza, temas como el desminado humanitario, la extorsión, el homicidio, las intenciones de expansión del Clan del Golfo y el problema migratorio en el Darién.
“El propósito es tener más capacidades, mayor recurso humano, vincular también mucho más a la población. Además, el compromiso de la Policía Nacional de revisar el número de policías en las estaciones, para que se pueda establecer un mínimo de, por lo menos, 15 policías por unidad”, dijo el ministro de Defensa.
Frente a la migración irregular, el jefe de la cartera de Defensa manifestó que las acciones de las autoridades están enfocadas, no en los migrantes, sino en el actuar de las organizaciones delictivas como el Clan del Golfo, que obligan a que cualquier servicio de quien quiere migrar tenga que ser contratado con ellos o con empresas u organizaciones vinculadas a este grupo ilegal.
El ministro Velásquez dijo que “las operaciones específicas, como Hefesto y Agamenón, tienen un importante componente en cuanto a la inteligencia financiera y la identificación de los flujos de dinero que obtienen el Clan del Golfo y empresas o dependencias asociadas a esa práctica criminal”.
Así mismo, se refirió a la situación de minas antipersona que “está obligando a las comunidades a permanecer confinadas y encerradas”, razón por la cual, se tomó la decisión de realizar acciones concretas y urgentes para mitigar esta situación.
Finalmente, se refirió a la seguridad de los alcaldes y afirmó que la Unidad Nacional de Protección tiene a su cargo las medidas de seguridad en coordinación con la Policía Nacional, valorando el nivel de riesgo y la necesidad de reforzar o instalar medidas de protección.
