Perú suspendió el permiso otorgado hace un mes a la empresa mexicana SPCC para empezar a explotar la mina de cobre Tía María, hasta que se resuelva un reclamo ambiental de las autoridades locales, informó el gobierno.
La suspensión «de la autorización de construcción» a la mexicana Southern Perú Copper Corporation para el proyecto Tía María, por 1.400 millones de dólares, en la región sureña de Arequipa, «se dará por un plazo no mayor de 120 días», dijo el ministerio de Energía y Minas.
Durante ese lapso, el Consejo de Minería -un tribunal administrativo- deberá resolver el recurso del gobierno regional de Arequipa que pide dejar sin efecto la autorización a la minera.
El gobierno regional de Arequipa, que rechaza el proyecto y apoya las protestas de comunidades locales contra la SPCC, denunció un «ecosistema frágil» en las tierras que serán removidas para llevar adelante la explotación del mineral.
«El Consejo de Minería es un ente autónomo. Son cinco vocales los que conforman el consejo y la votación ha sido por unanimidad», dijo el ministro de Energía y Minas, Francisco Ísmodes, a la radio RPP, sobre la decisión.
El ministro instó a las autoridades de Arequipa a aprovechar la suspensión para impulsar un diálogo con la minera para hacer viable el proyecto.
En la zona del yacimiento, los habitantes de Valle de Tambo, llevan tres semanas en paro en rechazo a las actividades extractivas, según la prensa peruana.
Diversas comunidades se oponen porque temen que se dañen los ríos, los ojos de agua y sus cultivos, porque los minerales se encuentran en las cabeceras de cuenca, donde los ríos nacen.
«La justa demanda del Valle de Tambo se va imponiendo. Suspensión es una medida temporal que requiere resolución definitiva», señaló el partido izquierdista Nuevo Perú a través en Twitter.
Pero la suspensión puede afectar las inversiones extranjeras, según analistas.
«Los destructores del futuro del país lograron su propósito, suspender la licencia de Tía María. Con unas cuantas movilizaciones violentas de pequeños grupos lograron amedrentar al Presidente. Es un duro golpe al pueblo peruano», tuiteó el analista político Jaime de Althaus.
Tía María es un caso emblemático del gobierno peruano en la generación de inversión y dinamizar la economía.
Según el ministerio de Energía y Minas, la producción estimada es de 120.000 toneladas de cobre anuales. La empresa dijo que proyecta invertir 1.400 millones de dólares y que se crearán más de 9.000 nuevos empleos formales durante la construcción.
Desde el 2011, cuando se inició el proceso para el permiso de operaciones para Tía María, las protestas contra el proyecto dejaron seis muertos entre los pobladores.
