Ante la emergencia registrada por la intensidad de las lluvias en la Autopista Norte y que abrió el debate de la urgente necesidad de priorizar la ampliación de la vía, la Procuraduría General de la Nación, preocupada por esta problemática, llamó al alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, y a las entidades responsables del proyecto de construcción a que expliquen los avances y planes que se tienen no solo para prevenir sucesos como el ocurrido sino para la modernización del tramo vial.
Para Gustavo Guerrero, Procurador Delegado para Asuntos Ambientales, Minero Energéticos y Agrarios, no es justo que los usuarios de la troncal tengan que padecer diariamente problemas de movilidad y enormes trancones para salir o ingresar a la ciudad, por lo que se hace obligatorio una intervención inmediata por parte de las autoridades competentes.
Y es que a la caótica situación del tránsito vehicular que se vive en la importante vía se suma el de las lluvias, que cuando se presenta la temporada invernal causan graves y serios estragos a la altura del humedal Torca Guaymaral, tal como ocurrió semanas atrás cuando la ciudad colapsó por el desbordamiento de las aguas.
Ante la situación, y teniendo en cuenta que se tiene proyectada la ampliación del corredor vial entre las calles 191 y 245 y cuyas obras se han visto retrasadas por la obtención de la licencia ambiental, el Procurador Delegado convocó a una reunión este martes 19 de noviembre, en la que tendrán asiento, además del alcalde Galán, los directivos de la Agencia Nacional de Infraestructura- ANI-, de la Agencia Nacional de Licencias Ambientales-ANLA- y el gerente de la Concesión Ruta Bogotá Norte.
