Estados Unidos y China han firmado un nuevo acuerdo comercial en búsqueda de poner fin a una etapa de tensiones comerciales y restablecer el flujo de exportaciones entre ambas potencias. La información fue confirmada este viernes 27 de junio por el Ministerio de Comercio chino, que destacó que se trata de una decisión conjunta tomada tras semanas de negociaciones bilaterales.
El pacto contempla la eliminación de varias medidas restrictivas impuestas durante la reciente guerra comercial. Según el comunicado oficial emitido por Pekín, China seguirá aprobando permisos de exportación para productos sensibles, como tierras raras, materiales clave para la industria tecnológica y de defensa.
A cambio, Estados Unidos se comprometió a levantar algunas de las sanciones y barreras impuestas a las exportaciones chinas, aunque no se especificaron cuáles.
El presidente estadounidense, Donald Trump, confirmó la firma del acuerdo el jueves 26 de junio desde la Casa Blanca, señalando que se alcanzó un consenso con su homólogo chino, Xi Jinping, en una conversación sostenida a inicios de junio.
El documento final fue sellado tras una ronda definitiva de negociaciones llevada a cabo en Londres, tras intentos previos en Ginebra que habían logrado una tregua temporal de 90 días.
Uno de los puntos más conflictivos fue el control chino sobre la exportación de tierras raras, insumo esencial para la fabricación de vehículos eléctricos, chips y otros productos de alta tecnología.
En abril, Pekín había impuesto nuevos requisitos para su comercialización, lo que generó preocupación en la industria estadounidense. Con el nuevo acuerdo, se espera que esos controles se flexibilicen.
Ambos países también se acusan mutuamente de haber incumplido acuerdos anteriores, lo que había intensificado la tensión en los últimos meses. China criticó restricciones impuestas por EE. UU. sobre tecnología avanzada, mientras que Washington señaló a Pekín por mantener límites severos a las exportaciones estratégicas.
El impacto de la guerra comercial no ha sido menor. En Estados Unidos, la economía mostró una leve contracción en el primer trimestre del año, mientras que, en China, los sectores manufactureros, especialmente el automotriz, registraron una fuerte caída en sus beneficios.
El acuerdo firmado pretende frenar esta dinámica y reactivar las relaciones económicas. Según el secretario de Comercio de EE. UU., Howard Lutnick, este es solo el comienzo.
“Vamos a tener acuerdo tras acuerdo tras acuerdo”, afirmó, en referencia a nuevas negociaciones previstas con países como India.
APN Noticias