Queda mucho por hacer en la lucha de Colombia contra el cultivo de coca, la materia prima de la cocaína, dijo el lunes el secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, quien destacó los esfuerzos del país sudamericano para combatir el narcotráfico.
Colombia ha estado bajo la presión permanente del Gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para frenar el cultivo de coca por parte de bandas criminales y grupos guerrilleros, especialmente después que las cifras de cultivos se dispararon en los últimos años.
El presidente de Colombia, Iván Duque, informó recientemente que las Fuerzas Militares y la Policía Nacional erradicaron más de 100.000 hectáreas de hoja de coca el año pasado, una cifra récord, al tiempo que confiscaron más de 434 toneladas de cocaína.
“Como resultado de los agresivos esfuerzos contra el narcotráfico del presidente Trump y del presidente Duque se ha podido reducir enormemente el cultivo y producción de cocaína”, dijo Pompeo.
“Queda mucho por hacer, estamos en ese camino”, afirmó el secretario de Estado de Estados Unidos, quien asistió a una conferencia regional contra el terrorismo en Bogotá.
La erradicación de la coca es la mejor manera de proteger los esfuerzos de paz y combatir el narcotráfico que alimenta la violencia, dijo Duque a Reuters en una entrevista la semana pasada.
“El trabajo en la lucha contra las drogas se mantiene, es integral, responde a una política de Gobierno y a una política de Estado”, afirmó Duque en declaraciones conjuntas con Pompeo.
Duque apoya el reinicio de la fumigación aérea de cocales con el herbicida glifosato, que es más eficiente y segura para las tropas que la erradicación manual.
Acusaciones a Maduro
La fumigación desde aviones con el herbicida fue prohibida en 2015 por la preocupación por daños ambientales y a la salud, pero Duque busca reiniciarla bajo estrictas condiciones de seguridad establecidas por la Corte Constitucional.
Pompeo agradeció a Colombia por los esfuerzos para brindar ayuda a 1,6 millones de emigrantes venezolanos que han llegado al país en los últimos años, huyendo de la escasez de alimentos y medicamentos en medio de la crisis política, económica y social en la nación petrolera.
Duque, en tanto, acusó al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de apoyar y refugiar en su país a guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y a disidentes de las FARC, mientras que el secretario de Estado lo señaló de proteger al grupo extremista Hezbolá.
“Todos sabemos también que el máximo poder terrorista del régimen iraní, Hezbolá, ha encontrado un hogar en Venezuela bajo Maduro. Esto es inaceptable”, afirmó Pompeo.
Pompeo se reunió con el líder de la oposición venezolana, Juan Guaidó, reconocido como el presidente legítimo de Venezuela por más de 50 países, incluido Estados Unidos.
El líder de la oposición desafió una orden judicial que le impedía salir de Venezuela para viajar a Colombia y se espera que continúe hacia el Foro Económico Mundial en Davos.
En la cumbre contra el terrorismo, el mandatario colombiano hizo un llamado para que se realicen lo más pronto “elecciones libres y creíbles” en Venezuela.
