El presidente de Colombia, Iván Duque, solicitó el miércoles a Venezuela que deporte a través de la Interpol a una excongresista acusada de delitos de corrupción electoral que fue detenida esta semana en el país petrolero, en un hecho que reactivó el cruce de declaraciones entre los dos gobiernos.
Aída Merlano, quien realizó una fuga cinematográfica en octubre cuando escapó de un consultorio odontológico de Bogotá lanzándose de un segundo piso con una soga y huyendo en la parte trasera de una motocicleta, fue detenida el lunes en Maracaibo, capital del estado de Zulia, en la frontera con Colombia.
Duque solicitó la extradición de Merlano a través del líder de la oposición Juan Guaidó, a quien reconoce como el legítimo jefe de Estado de Venezuela, lo que provocó comentarios sarcásticos del presidente Nicolás Maduro, quien calificó el procedimiento como una “ridiculez”, al tiempo que cuestionó a Bogotá por no tener relaciones con su Gobierno.
Duque recordó que fue Maduro quien rompió en febrero de 2019 las relaciones diplomáticas y políticas con Colombia, ordenando la expulsión de todo el personal diplomático y consular.
“Que ahora no venga la dictadura de Venezuela a tratar de escudarse en argumentos que no son. Aquí hay un tema de fondo. Aída Merlano es una delincuente, es una persona que tiene además unos antecedentes que ya son conocidos en el país de corrupción”, dijo Duque en un acto de gobierno.
“Nosotros hemos tenido comunicación a través de la Interpol para que se surtan los procedimientos. Lo que debe ocurrir es que esa señora sea deportada a Colombia y que aquí las autoridades hagan lo que les corresponde, que es aplicarle todo el peso de la ley”, sostuvo el mandatario.
Guaidó, quien no tiene el control de la policía ni del poder judicial, se comprometió a colaborar con Colombia para facilitar el regreso de la excongresista, a quien un tribunal venezolano le imputó los delitos de usurpación de identidad, uso de documento falso y asociación para delinquir.
El líder de la oposición se declaró presidente interino en enero del 2019, denunciando a Maduro como un usurpador del cargo por reelegirse en mayo del 2018 en unos comicios que califica de fraudulentos. Guaidó es reconocido por más de 50 países como el mandatario venezolano.
