Nuevo episodio violento en Israel, esta vez en la costera Tel Aviv. Según fuentes médicas, ayer jueves al menos dos personas murieron y cuatro están gravemente heridas después de recibir disparos en un ataque en varios puntos de la ciudad.
«Un terrorista abrió fuego a corta distancia y luego huyó a pie. Hay varios heridos», dijo el portavoz de la policía de Tel Aviv, Eli Levy, en el Canal 13 de televisión.
Tras los hechos, un gran número de unidades de emergencia y policías se desplazaron al lugar de los hechos, para atender a las personas heridas y esclarecer la autoría del crimen.
Uno de los puntos de los ataques fue un bar, desde donde la gente huyó aterrorizada tras oír los disparos. Para evitar más bajas o heridos y no causar una situación de histeria colectiva, la policía pidió a los ciudadanos que no salieran de sus casas.
«No salgan de sus casas. No saquen la cabeza por la ventana. No salgan a sus balcones», añadió Levy.
Aunque aún no se sabe quién cometió el crimen, fuentes oficiales han esclarecido que se trata de una sola persona.
«Vi cómo se rompía la ventana, la gente empezó a correr de repente y sentí que me daban por la espalda (…) Sentí mucha sangre. Vi sangre», dijo uno de los heridos de bala tras el ataque.
Desde la comunidad internacional, el embajador de Estados Unidos en Israel, Tom Nides, condenó los hechos:
«Horrorizado de ver otro cobarde ataque terrorista contra civiles inocentes, esta vez en Tel Aviv. Orando por la paz, y enviando condolencias a las víctimas y sus familias. ¡Esto tiene que parar!», dijo el diplomático a través de redes sociales.
Desde el pasado marzo, la violencia se ha recrudecido tanto en Israel como en la Cisjordania ocupada, con ataques de supuestos «terroristas» y bajas de palestinos -muchos jóvenes- a manos de la policía y el Ejército de Israel.
Por su parte, Israel ha registrado tres ataques en las últimas semanas que se han saldado con la muerte de al menos 11 personas.
Mientras se esclarecen los hechos, medios locales informaron de que el primer ministro está reunido con el ministro de Defensa, Benny Gantz, para evaluar la situación de seguridad y decidor qué medidas tomará el país.
