En la zona costera de Guayaquil, en Ecuador, un ataque armado dejó 10 personas muertas y tres heridas. Este es el segundo hecho violento que se registra en la costa de ese país durante el mes de abril. Ecuador está en alerta por el incremento de situaciones relacionadas con el narcotráfico. Las autoridades están investigando lo ocurrido.
En un ataque armado, fueron asesinadas 10 personas y tres resultaron heridas en la ciudad de Guayaquil, según han informado este domingo la Fiscalía y la Policía de Ecuador.
En el lugar de los hechos se encontraron un fusil y pistolas calibre 9 milímetros, informó la Fiscalía ecuatoriana en su cuenta de Twitter.
«Al momento, nuestras unidades de investigación e inteligencia realizan acciones operativas para identificar a los responsables», tuiteó la Policía Nacional, que ha ofrecido proporcionar más detalles sobre el hecho en las próximas horas. Hasta el momento no hay detenciones.
Con versiones de testigos, el general William Villarroel, jefe de la Zona 8 de la Policía en la provincia del Guayas, indicó en una rueda de prensa que al lugar del atentado llegó una camioneta con varios sujetos desconocidos, «con armas largas», quienes dispararon contra los ciudadanos.
«Creemos que se trata de una lucha de los grupos delincuenciales organizados, lucha por el territorio, por apropiarse de las diferentes actividades ilícitas», señaló Villarroel al añadir que presumen que los integrantes del grupo delincuencial que investigan se dedican al tráfico y expendio de drogas, amenazas y robo de vehículos.
Este es el segundo hecho violento en la costa ecuatoriana este mes. El primero ocurrió el pasado 11 de abril, cuando un grupo armado abrió fuego contra pescadores en un puerto de Esmeraldas. Aquella vez nueve personas murieron.
La ola de violencia tiene a Ecuador atenazada. Las autoridades tomaron medidas extremas para hacer frente a los atentados, secuestros y asesinatos, por lo que los grupos criminales vinculados al narcotráfico internacional serán considerados terroristas por representar una amenaza para la seguridad del Estado. La medida permitirá movilizar a militares sin necesidad de declarar estado de excepción.
El pasado viernes, el ministro ecuatoriano de Defensa, Luis Lara, aseguró que las Fuerzas Armadas han reforzado sus operaciones desde esa decisión. Lara detalló que se han intensificado las operaciones militares «en las zonas más conflictivas del territorio nacional para combatir y erradicar a los grupos criminales y sus aliados que cometen atentados terroristas y masacres, cumpliendo los protocolos y normas del derecho internacional y las disposiciones legales vigentes».
«Pueden estar seguros de que en las acciones contra los actos terroristas no vacilaremos en poner en práctica toda la capacidad, experiencia y profesionalismo de nuestros soldados. Es hora de decir basta a los criminales y sus aliados», manifestó Lara.