El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, inició este martes una nueva etapa en su transición a la Casa Blanca después de que el gobierno de Donald Trump le brindó acceso a recursos clave que le permitirán asumir el poder en enero.
La Administración de Servicios Generales (GSA, por su sigla en inglés) anunció ayer que reconocería formalmente la transición de Biden, luego de semanas en las que el presidente denunció que las elecciones de 3 de noviembre estuvieron marcadas por fraude generalizado, sin brindar evidencia.
En una publicación en Twitter, Trump respaldó la decisión.
Los críticos del presidente han dicho que su negativa a aceptar los resultados socavan la democracia estadounidense y minan la capacidad del próximo gobierno para luchar contra el coronavirus.
Si bien Trump no ha reconocido su derrota, la medida es lo más cerca que ha estado de aceptar que es hora de entregar el poder a Biden, quien asumirá el cargo el 20 de enero.
El anuncio de la GSA permitirá que el presidente electo acceda a millones de dólares en fondos y se concentre en armar un equipo de liderazgo.
También despeja el camino para que Biden y la vicepresidenta electa Kamala Harris reciban los informes regulares sobre seguridad nacional que también son enviados a Trump.
El martes, Biden y Harris tienen previsto presentar formalmente sus nominados a los cargos de seguridad nacional y política exterior en Wilmington, Delaware.
Dos autoridades del gobierno de Trump dijeron que los equipos de revisión Biden podrían comenzar a interactuar con funcionarios de las agencias de la administración republicana a partir del martes.
El equipo de transición de Biden dijo que las reuniones con funcionarios federales comenzarían con el equipo de respuesta de Washington a la pandemia del coronavirus, junto con discusiones sobre temas de seguridad nacional.
Biden señaló el lunes que Antony Blinken podría liderar el Departamento de Estado y John Kerry, un exsenador, secretario de Estado y nominado demócrata a la presidencia en 2004, podría servir como su enviado especial sobre clima.
Biden, quien planea revertir muchas de las políticas “América Primero” de Trump, también nombró a Jake Sullivan como su asesor de seguridad nacional y a Linda Thomas-Greenfield como embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, ambos con experiencia en puestos de gobierno de alto nivel.
Es posible que escoja a la expresidenta de la Reserva Federal Janet Yellen como la próxima secretaria del Tesoro, según dos aliados del presidente electo, quienes hablaron bajo condición de anonimato para discutir una decisión personal que aún no ha sido hecha pública.
