La senadora María Fernanda Cabal, una de las principales voces de la oposición en Colombia, lanzó una fuerte advertencia sobre las implicaciones del nombramiento del general Pedro Sánchez como ministro de Defensa. Según la congresista, esta decisión compromete la estructura de mando de las Fuerzas Militares y pone en riesgo la seguridad nacional en un momento de alta inestabilidad en el país.
El anuncio de la llegada de Sánchez al Ministerio de Defensa generó de inmediato controversia dentro y fuera de las Fuerzas Armadas. Para la congresista esta situación representa un “golpe estructural” a la defensa del país, debilitando las capacidades estratégicas del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea.
«Este no es solo un problema de jerarquía, sino un atentado contra la estabilidad de nuestras Fuerzas Militares. Si los generales en la línea de mando se ven obligados a retirarse, perderemos décadas de conocimiento estratégico y liderazgo. Esto ocurre en el peor momento posible, cuando la seguridad nacional atraviesa una de sus crisis más profundas», señaló la senadora.
Comunicación a la cúpula militar:
Colombia los necesita
El nombramiento del general Pedro Sánchez como ministro de Defensa ha generado un grave dilema dentro de nuestras Fuerzas Militares. Al tener menor antigüedad que los actuales comandantes de cada una de las fuerzas, su…
— María Fernanda Cabal (@MariaFdaCabal) February 20, 2025
Crisis de seguridad y riesgos de una institucionalidad debilitada
El nombramiento de Sánchez ocurre en un contexto en el que Colombia enfrenta una creciente ola de violencia. La política de «paz total» impulsada por el gobierno de Gustavo Petro ha sido cuestionada por múltiples sectores debido al fortalecimiento de grupos armados ilegales, el aumento de homicidios en zonas rurales y la expansión del narcotráfico.
Diversos informes han señalado que estructuras como el Clan del Golfo, las disidencias de las FARC y el ELN han aprovechado los procesos de negociación con el gobierno para expandir su presencia territorial, mientras que las Fuerzas Militares han visto limitada su capacidad de acción debido a directrices que han reducido las operaciones ofensivas.
Para Cabal, la pérdida de oficiales experimentados en este escenario es un error estratégico que favorece a los grupos ilegales. Según la congresista, los cambios en la cúpula militar no responden a criterios técnicos sino a decisiones políticas que intentan desmantelar la institucionalidad castrense.
«Quienes han guiado a nuestras Fuerzas con honor no pueden dar un paso al costado cuando más se les necesita. La patria demanda hoy, más que nunca, el compromiso de sus Fuerzas Militares. No podemos permitir que decisiones ajenas a la seguridad nacional socaven la institucionalidad de quienes han entregado su vida a la defensa de Colombia», enfatizó la senadora.
Preocupación en los sectores militares
Las advertencias de Cabal reflejan el malestar que existe dentro de los círculos militares. En los últimos meses, han surgido voces de oficiales retirados que han alertado sobre la pérdida de cohesión dentro de la fuerza pública debido a la incertidumbre que han generado las decisiones del gobierno.
Algunos analistas han señalado que el posible retiro de altos mandos podría generar una crisis de liderazgo dentro de la institución, afectando la moral de la tropa y la efectividad de las operaciones en todo el territorio nacional.
Este no es el primer episodio en el que el gobierno de Gustavo Petro toma decisiones que impactan la jerarquía militar. En 2022, apenas al asumir la Presidencia, el mandatario retiró a más de 50 generales y almirantes, marcando un precedente sin igual en la historia reciente de las Fuerzas Militares. Dichas decisiones han sido interpretadas por sectores de la oposición como un intento de reformar la doctrina de seguridad del país con una visión política que, según advierten, podría debilitar la capacidad de respuesta del Estado ante las amenazas actuales.
Cabal insiste en no politizar la seguridad nacional
Para la senadora Cabal, la seguridad de Colombia no puede estar sujeta a cálculos políticos. En su pronunciamiento, reiteró que los altos mandos deben mantenerse firmes en su deber constitucional de garantizar la estabilidad y la defensa del país.
«La seguridad de Colombia no puede ser sacrificada por decisiones políticas. Necesitamos Fuerzas Militares fortalecidas, con mando claro y experiencia en el terreno. Si debilitamos la institucionalidad, el único beneficiado será el crimen organizado», concluyó la líder opositora.
APN Noticias
