Boric y Scholz acordaron crear un centro de recordación en la antigua Colonia Dignidad, un sitio fundado por un militar nazi en el que se registraron violaciones a los derechos humanos.
Olaf Scholz llegó a Chile como parte de su gira por Latinoamérica. En Santiago, la capital, fue recibido por el jefe de Estado de la nación suramericana, Gabriel Boric.
La agenda comenzó con una visita al Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, un espacio dedicado a recordar a los muertos y desaparecidos durante la dictadura militar de Augusto Pinochet.
Ambos líderes sostuvieron una reunión más tarde en el Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo, donde también ofrecieron una conferencia de prensa. En el encuentro con los medios, el jefe de Estado chileno destacó la importante inversión alemana en el país.
“Según el Banco Central, solo por dar un ejemplo, el monto actual de inversión alemana supera los mil millones de dólares. Y tenemos un tremendo potencial para seguir creciendo, creando cadenas de valor” y “transfiriendo tecnología”, dijo Boric.
Por su parte, el canciller alemán manifestó su interés de profundizar las relaciones con Chile al tiempo que se alegró de que Boric aceptara su invitación a formar parte del “Club del Clima”, una iniciativa que intenta trabajar en la neutralidad climática.
En este sentido resaltó que, dada la importancia de las energías renovables y el hidrógeno como combustibles del futuro, Chile tiene excelentes condiciones para producir hidrógeno de manera amigable con el medio ambiente.
Colonia Dignidad: una deuda que se intenta dejar atrás
Otro de los temas tratados en la conferencia fue la creación de un sitio de recordación en la antigua Colonia Dignidad. Un sitio creado por el suboficial nazi Paul Schaefer en el que, entre otras cosas, se llevaron a cabo torturas durante la época de Pinochet.
“Sabemos que se trata de un tema sensible, no es fácil encontrar una solución. Por eso, con toda la prudencia, queremos ofrecer nuestro apoyo y hacer lo que podamos hacer”, enfatizó Olaf Scholz.
Por su parte el mandatario chileno se mostró agradecido y en favor de apoyar “la voluntad del Gobierno de Alemania de contribuir a la búsqueda de la verdad y hacer de la ex Colonia Dignidad un espacio de memoria”. “Es rol del Estado chileno el seguir luchando de manera incansable por toda la verdad y toda la justicia”, puntualizó.
“La historia de Colonia Dignidad es terrible, desgarradora”, expresó en otro momento el jefe de La Moneda (…) Y es terrible también, y no está de más recordarlo, el apoyo que tuvo por parte de un sector de la política chilena, algunos de los cuales están todavía en el escrutinio público”.
En el sitio, hoy renombrado como “Villa Baviera”, el militar nazi sometió a más de 300 personas a trabajos forzados, abusos sexuales o manipulación mental, entre otras prácticas. Allí también se torturó y asesinó a opositores al régimen dictatorial por parte de la Dirección de Inteligencia Nacional, la policía secreta de Augusto Pinochet.
El asentamiento fue fundado en 1961 y cerrado 30 años después tras el retorno de la democracia. Víctimas y organizaciones de derechos humanos han señalado, tanto a Alemania como a Chile, de no seguir con suficiente empeño los crímenes cometidos en el lugar.
Ucrania, entre las preguntas de la prensa
“No hay país que apoye más a Ucrania que Alemania”, afirmó el jefe de Gobierno bávaro en medio del intercambio con la prensa. Ante la pregunta de que si Berlín enviaría aviones de guerra si el conflicto se agrava, el canciller subrayó que, junto al presidente de Estados Unidos, excluyeron “ciertos aspectos al inicio de la guerra, porque esto hubiera llevado a una mayor escalada”.
Scholz resaltó además que rechaza “enviar tropas a Ucrania”. También puntualizó que el conflicto no pude ser “una competencia sobre quién envía más ayuda”. En resumen, mencionó que se ha “brindado apoyo de forma financiera, humanitaria y también con envío de armas”.
Olaf Scholz subrayó que tratará de evitar, con todos sus esfuerzos “una guerra entre Rusia y las naciones de la OTAN”, aspecto que hasta ahora “han logrado”. El canciller también advirtió que la guerra de Ucrania “no se trata de un asunto meramente europeo, sino un desafío de orden internacional”.
La próxima parada de la gira del canciller alemán será Brasil. Allí será recibido por el presidente Luiz Inácio ‘Lula’ da Silva.