Hace unos días se llevó a cabo el panel sobre perspectivas de inversión en activos inmobiliarios liderado por ColCapital en Bogotá. En este se desarrollaron diferentes espacios de discusión sobre temáticas alrededor del comportamiento de las rentas en el sector, inversiones en temas de desarrollo sostenible y gobierno corporativo, así como perspectivas de riesgo en la coyuntura actual.
En Colombia el mercado inmobiliario ha tenido una gran recuperación en el sector comercial, según cifras de Pei Asset Management cada mes cerca de 9,5 millones de personas entran a un centro comercial, lo que ha logrado dinamizar el arrendamiento de estos lugares; mientras que el mercado de oficinas se ha mantenido gracias a la demanda de BPOs, call centers, y empresas internacionales del sector de tecnología que han llegado al país, un ejemplo de esto es el edificio Connecta de la Calle 26 con una vacancia menor a 5% durante los dos últimos años, según Credicorp Capital.
“Sin lugar a duda, el mercado inmobiliario es uno de los renglones más relevantes de la economía colombiana. Por esta razón desde ColCapital buscamos fortalecer el sector, impulsando las inversiones de capital institucional y de riesgo, y así continuar posicionando al país como un mercado atractivo. Esperamos que para el 2022 el sector continúe desarrollando activos y creando nuevas oportunidades de inversión para los fondos internacionales y nacionales”, puntualizó Paola García, directora ejecutiva de ColCapital.
Las tendencias de reactivación en el sector inmobiliario
Turismo vacacional en recuperación: se presentan ocupaciones superiores a prepandemia y se afirma que esté será el “nuevo petróleo” consolidándose como una fuente de divisas para el país.
Retail: se destaca la importancia de la experiencia de los consumidores al regresar a los centros comerciales, ya que los usuarios compran en línea, pero no descartan el comercio presencial. Un ejemplo, es la tienda de H&M inaugurada en Cali durante el mes de diciembre, la cual obtuvo un premio global por la mejor apertura de una tienda en el mundo, registrando más de $4.000.000 en ventas por metro cuadrado.
Logístico: el aumento en compras por parte de los consumidores y el crecimiento de e-commerce supone una oportunidad para almacenaje y bodegas. En la actualidad se están necesitando inmuebles con mayor valor agregado y especialización por temas de devolución (reverse logistics). Surge el nearshoring como oportunidad, al estar el país estratégicamente ubicado en el centro de las Américas, así como los tratados de libre comercio que se encuentran en vigor.
Oficinas: se registra un aumento de empresas regresando y algunos sectores en auge y crecimiento como los BPO’s (tercerización de servicios). Se ha incrementado la vacancia en activos clase B que no cumplen con todos los estándares de empresas multinacionales, pero al mismo tiempo se ha incrementado la ocupación en activos de alta calidad, o clase A. Se presenta un 44% trabajo híbrido, 37% presencial y menos del 20% virtual según el gestor inmobiliario Pienssa.
En la actualidad, la percepción de riesgo ha cambiado y se han desarrollado transformaciones en los contratos inmobiliarios como cláusulas de salida, alivios y protección a los inquilinos; además la virtualidad paso de ser un riesgo a un canal más de diversificación.
Finalmente, el rol del sector inmobiliario representa un motor de crecimiento económico y gran generador de empleo. El concepto de ofrecer a los propietarios valores agregados dentro de los activos inmobiliarios resulta importante para la dinamización y crecimiento de Colombia como un destino de inversión para el 2022.
