Por: Freddy Ávila/ En Colombia la Ley 743 de 2002, es aquella por la cual se desarrolla el artículo 38 de la Constitución Política de Colombia en lo referente a los organismos de acción comunal y la directriz emanada por el Congreso de la República, en lo referente a temas de asociación y organización comunal.
Así mismo, mediante el Decreto 2350 de 2003, el Presidente de la Republica de Colombia el Doctor Álvaro Uribe Vélez, en ejercicio de sus facultades reglamento los aspectos esenciales para el buen desenvolvimiento de la acción comunal en Colombia y la consecución de sus objetivos.
Actualmente en el Congreso de la República, en la Comisión Séptima constitucional permanente cursa el texto definitivo aprobado en primer debate del proyecto de Ley No. 180 de 2017 Cámara “Por medio del cual se modifica la Ley 743 de 2002 y se dictan otras disposiciones”, donde a todas luces se refleja una postura más garantista sobre los derechos de comunales, que se espera quede aprobado este proyecto lo más pronto posible y pase a ser Ley de Colombia.
En el área local, en el Departamento de Santander la oficina que presta la atención a las diferentes Juntas de Acción Comunal, está en cabeza de la Casa de Participación, esta oficina se encuentra anexa a la Secretaria de Gobierno hoy Secretaria del Interior.
En el área metropolitana de los 87 Municipios solo Bucaramanga cuenta con una oficina para el manejo de sus Juntas de Acción Comunal y esta se encuentra adscrita a la Secretaria de Desarrollo Social del Municipio, en lo referente a los demás municipios el órgano de control es la Gobernación de Santander.
Las J.A.C. por lo general han sido siempre visibles a través de su presidente, pero ellas están integradas hasta por más de 20 personas, sus delegados cumplen una función específica como es asistir junto con presidente al proceso de elección de las asociaciones municipales (Asojuntas).
En la gran mayoría de los barrios las JAC han logrado importantes gestiones ante las diferentes entidades del Estado y estas se ven reflejadas en obras tales como: canchas, parques infantiles, salones comunales, gimnasios al aire libre, pavimentación de vías, expansión de alumbrado público entre otras, pero no se debe dejar de lado otro tipo de gestión que no es tan palpable o visible, pero que si deja en la comunidad un impacto social en el desarrollo de actividades como participación en el arte y la cultura, manualidades, talleres, cursos de formación con el SENA, jornadas de bailo terapia, brigadas de salud y belleza entre muchas otras gestiones más que talvez no se alcancen a mencionar del papel de un verdadero líder comunal.
Hoy se quiere reconocer la difícil tarea que asume quien decide ser Presidente o Presidenta de una Junta de Acción Comunal en un barrio, pues al igual que cualquier líder elegido por elección popular también está sometido al escarnio público, a la burla, maltrato verbal y hasta físico, pero el verdadero líder sigue en pie de lucha, trabajando y gestionando para su comunidad, muchas veces asumiendo de su propio pecunio gastos y costos que se generan por el desempeño de dicha labor.
Muchos líderes comunales se pueden parar ante su comunidad con la frente en alto y la tranquilidad de haber traído obras que modernizaron y jalonaron el desarrollo de sus sectores, pues han sido capaces de gestionar y ejecutar recursos del orden municipal, departamental y quizás hasta del orden nacional que buscan satisfacer necesidades básicas de los ciudadanos.
Este tipo de gestiones no son sencillas, se debe mantener una buena relación con la administración Municipal o muchas veces tener el llamado “padrino”, es por ello que muchos comunales han venido tomando la decisión de participar en las contiendas políticas siendo candidatos a ediles y concejales, para tener una mayor visibilidad del mandatario de turno y sectores que él representa, es claro que el comunal de base tiene de primera mano el conocimiento pleno de las necesidades primordiales de los ciudadanos.
Actualmente hemos visto que las administraciones municipales han venido trabajando de la mano del gobierno departamental y nacional en la legalización de los barrios subnormales y asentamientos para lograr llevar a cabo la inversión dejando atrás el tema de asociaciones de vivienda o corporaciones y dando paso a la creación de nuevas Juntas de Acción Comunal.
Para concluir invitamos a todos los líderes comunales que deseen trabajar y gestionar, por un verdadero desarrollo de sus comunidades, a hacerse visibles y participar activamente como candidatos a las diferentes corporaciones públicas en las próximas elecciones del 27 de octubre.
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