A través del artículo 12 del Decreto 491 de 2020, que expidió el presidente Iván Duque, quedaron autorizadas ante la coyuntura del Covid-19 las reuniones no presenciales en los órganos colegiados de las ramas del Poder Público, como es el caso del Congreso.
Sin embargo, como en este caso, el Congreso se debe regir también por la Ley 5 de 1992 donde no se otorga validez legal a las reuniones o sesiones virtuales, no se sabe si se podrán llevar a cabo o no estos encuentros digitales.
“A nosotros nos rige la Ley 5 de 1992, es una ley supremamente rígida y es muy difícil hacerla compaginar con unas sesiones virtuales. Por eso, le estamos pidiendo al Presidente, al Gobierno y a nuestros colegas de las mesas directivas que el Congreso necesita tener el marco legislativo para poder ejercer a cabalidad las funciones constitucionales y legales y ante todo para que la voz del Congreso no se silencie, especialmente en un momento tan importante como el que atraviesa el país y el mundo por cuenta de la pandemia del Covid-19”, manifestó la representante Catalina Ortiz.
En concreto, la norma firmada por Duque señaló que “las convocatorias deberán realizarse de conformidad con los respectivos reglamentos y garantizar el acceso a la información y documentación requeridas para la deliberación».
«Al menos 42 senadores salieron del país en los últimos meses, lo que aumenta el riesgo de contagio del Covid-19 en caso de sesionar de forma presencial», dijo Lidio García Turbay, presidente del Senado.
«Superada la dificultad jurídica, hoy a través del decreto presidencial 491 del 28 de marzo quedan autorizadas las sesiones del Congreso para deliberar y decidir virtualmente», concluyó.
