A finales de diciembre de 2024 e incluso a principios de enero de 2025 se registraban incendios forestales en el departamento de Boyacá, posteriormente se mencionaron unas pocas heladas y, ahora, acaba de iniciar una temporada de intensas lluvias.
Dicha variabilidad del clima, que también soportan otros departamentos como Santander, tiene un efecto directo en los precios de los productos, por lo que se esperaría un aumento de los productos agrícolas y pecuarios en esta región del país.
“Se registran lluvias permanentes y tanta variabilidad del clima tienen una incidencia directa en los precios de los productos”, informó Nubia Elizabeth Bermúdez Tarazona, secretaria de Agricultura del Departamento de Boyacá.
Según la alta funcionaria se han registrado 18 eventos de reducción extrema de temperatura y el gobierno departamental se encuentra haciendo los estudios correspondientes sobre la respectiva afectación.
Las lluvias se adelantaron
De otra parte, Víctor Manuel Fajardo Becerra, presidente de la Federación de Ganaderos de Boyacá, Fabegán, dijo que las lluvias se adelantaron. “A comienzos de febrero de cada año usualmente se registran unas pocas heladas, particularmente en el Altiplano Cundiboyacense”, manifestó.
No obstante, consideró que es mejor el invierno porque las heladas causan mayores estragos a los pastos que es el principal alimento del ganado bovino en la región.
De acuerdo con el dirigente a principios de año se presentaron tres heladas, pero no generaron efectos drásticos.
Cronología de la variabilidad
A finales de 2024 y en los primeros días del 2025 se registraron en Boyacá 24 incendios forestales. El de mayor magnitud en el páramo La Cortadera que tiene jurisdicción en los municipios de Rondón, Siachoque, Toca y Pesca. Estimaciones de la Unidad de Gestión del Riesgo de Boyacá, indican que se vieron afectadas más de 548 hectáreas.
Asimismo, en el páramo Las Alfombras, las llamas habrían consumido 98 hectáreas de vegetación nativa.
Ahora a principios de febrero que por lo regular vienen las heladas en el departamento considerado minifundista en la actividad ganadera, el impacto se atribuye a las fuertes lluvias.
El caso más reciente fue una granizada el pasado 5 de febrero en Arcabuco que causó daños en cultivos. “Impactó los cultivos. La pérdida fue de cerca de 30.000 plantas”, dio a conocer la alcaldía de este municipio.
La lluvia taponó canales y caminos. “Una carretera fue arrasada por la creciente de una quebrada”, afirmó Hernando Molina, comandante del Cuerpo de Bomberos de Arcabuco.
“Varias familias perdieron parte grande de sus pertenencias. En un caso particular, evacuamos a una familia con seis niños, aunque por fortuna solo hubo daños materiales. También se reportaron afectaciones en cultivos de papa y arándanos, lo que preocupa a los agricultores de la zona”, dijo.
“También se registraron inundaciones en Sogamoso que en una ocasión bloqueó una vía clave que comunica con los municipios de Nobsa y Corrales”, manifestó Molina.
APN Noticias
