Javier Milei es un tipo estridente. Llama la atención por su espeso pelo negro, que recuerda a peinados de décadas pasadas. Épocas en las que se desempañaba como portero de fútbol e incluso como cantante de un grupo de heavy metal. Milei es ahora economista, se define como ultraliberal e incluso anarcocapitalista y apareció en la política argentina con un discurso “anticasta”.
Su forma de actuar, su discurso y sus maneras – con frases como “zurdos de mierda, están perdiendo la batalla”, en referencia a la izquierda – recuerdan a la de otros personajes políticos como Donald Trump o Jair Bolsonaro. Milei no rehúye la comparación. Desde el pasado 10 de diciembre es diputado por la provincia de Buenos Aires de la mano del partido de extrema derecha “La Libertad Avanza”.
Este pasado miércoles, llevó a cabo su última estridencia. Entre más de un millón de inscritos, sorteó su primer sueldo público como diputado entre más de un millón de inscritos a la rifa. El sorteo se llevó a cabo en Mar del Plata, ciudad costera que en estos meses de verano es destino predilecto de muchos argentinos para sus vacaciones estivales.
La web creada para el evento registró un total de 1.040.625 personas inscritas. El ganador, un hombre de 40 años, se hizo con un monto total de 205.000 pesos argentinos, unos 1.979 dólares estadounidenses. Desde ayer tendrá 10 días de plazo para demostrar su identidad. En caso contrario, se repetirá la rifa.
Acusaciones de populismo entre críticas al gobierno
«Nosotros no te vamos a regalar el pescado, te vamos a enseñar a pescar. Espero que después de esto bastantes argentinos despierten y no confundan populismo y repartir la ajena con devolverle el dinero a aquellos que lo generaron honestamente», espetó Milei a los espectadores en una de sus ya habituales “clases abiertas” que suele hacer ante su público.
Estas palabras se entendieron como respuesta a las críticas de populismos desatadas por la rifa y no desaprovechó el momento para expresar su descontento también con el gobierno. Mirlei recibió críticas también por el mero hecho de repartir su sueldo. El pasado 6 de enero la diputada de Juntos por el Cambio, Sabrina Ajmechet, se preguntaba en Twitter sobre cómo vive Milei si dona su salario.
“A favor de una dirigencia política que viva de sus sueldos. Sino solo los ricos podrían hacer política, cómo pasaba en general en el s. XIX”, añadía. En una entrevista con el periódico argentino Clarín, el diputado del Frente de Izquierda Unidad, Nicolás del Caño, atacó también a Milei con dureza.
«Personajes como Milei, que hablan de ‘zurdos de mierda’, no merecen ningún respeto», sostuvo. Y añadió que “él con eso está mostrando que los únicos que pueden ser legisladores e intervenir en política son empresarios, o gente que tenga garantizado un sustento y que no trabaje”. Lo acuso también de ganarse una base de datos con el concurso.
Denuncia de la Agencia de Acceso de la Información Pública
La misma idea que Nicolás del Caño parece tener la Agencia de Acceso de la Información Pública (AAIP), que días atrás anunció una investigación oficial para indagar sobre la legalidad del sorteo. Según el organismo se podría haber violado la ley de protección de datos argentina.
En la web del sorteo no aparecía ningún apartado con base en la protección de datos. Tampoco existía especificación sobre el destino de los datos facilitados ni si los inscritos podrían ejercer su derecho de control que contempla la ley 25.326 sobre el asunto.
En una entrevista radiofónica posterior a la rifa, Milei aseguró que “nadie está a punta de pistola, ponen los datos voluntariamente. Son datos básicos, no entran en la categoría de datos sensibles, son datos que aportas en cualquier red social”. Será la justicia quién decidirá si este sorteo y los demás previstos se ajustan a la legalidad.
