Una puerta abierta. El gobierno de Venezuela y su oposición acordaron este sábado crear un fondo gestionado por la Naciones Unidas para financiar programas de salud, alimentación y educación para atender la crisis humanitaria del país sudamericano, mientras que el gobierno de Joe Biden alivió algunas sanciones petroleras en un esfuerzo por impulsar las conversaciones recién iniciadas entre las partes.
Sellado en la Ciudad de México por los representantes del presidente Nicolás Maduro y de la oposición, incluida la facción respaldada por Estados Unidos y liderada por Juan Guaidó, el acuerdo es el banderazo de salida para la reanudación de unas negociaciones estancadas durante cinco años que buscan solucionar la compleja crisis venezolana.
En reacción, Estados Unidos acordó permitir al gigante petrolero Chevron bombear petróleo venezolano, con la excepción de que la estatal venezolana PDVSA no reciba dinero de las actividades.
Los términos generales del acuerdo para el fondo social gestionado por las Naciones Unidas fueron anunciados por el jefe de un grupo de diplomáticos noruegos que sirven de mediadores en las negociaciones.
Los recursos venezolanos retenidos en el sistema financiero internacional serán dirigidos a este fondo, aunque ninguna de las partes en las conversaciones, ni el facilitador principal de Noruega, Dag Nylander, aclararon si los gobiernos de Estados Unidos o Europa aceptaron permitir que los activos congelados se canalicen al nuevo mecanismo.
Los fondos estarían focalizados en estabilizar la red eléctrica venezolana, mejorar la infraestructura educativa y hacer frente al impacto de las lluvias e inundaciones de este año.
Fuentes de Reuters dijeron que los fondos congelados ascienden a más de 3.000 millones de dólares. El dinero, guardado en cuentas de propiedad venezolana en el extranjero, fue congelado por bancos estadounidenses y europeos después de que Estados Unidos intensificara las sanciones bajo la administración del presidente Donald Trump, y que fueron diseñadas para presionar al presidente Nicolás Maduro a dar pasos hacia elecciones libres.
Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, celebró las conversaciones como «un paso importante hacia la restauración de la democracia para los venezolanos». «Buscaremos que las partes logren acuerdos duraderos que establezcan el curso para elecciones presidenciales libres y justas en 2024», comentó en Twitter.
Maduro: «Luego veremos qué otros temas se pueden discutir»
El presidente venezolano Nicolás Maduro también reaccionó en Twitter: «Siempre buscaremos el diálogo con toda la sociedad venezolana. Seguimos dando pasos importantes para el bienestar de nuestro país».
La delegación de Maduro es encabezada por el líder del Congreso, Jorge Rodríguez, del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela, PSUV, y el grupo de la oposición estaba encabezado por el político, Gerardo Blyde.
Maduro reiteró que el objetivo de las conversaciones era recuperar los recursos «secuestrados» para la inversión pública: «Luego veremos qué otros temas se pueden discutir», agregó.
La agenda abarca las sanciones de Estados Unidos a Venezuela, las condiciones para las próximas elecciones presidenciales y la situación de cientos de presos políticos, aunque estos temas no se discutirán en esta ronda de conversaciones.
«Este acuerdo proporciona el modelo de cómo se puede asegurar un mayor progreso», expresó la Unión Europea en un comunicado.
Chevron puede volver a desempeñar un papel clave en la producción y exportación de petróleo de Venezuela
Chevron Corp recibió la licencia estadounidense que permite a la segunda mayor petrolera de Estados Unidos ampliar su producción en Venezuela y llevar el crudo del país sudamericano hacia Estados Unidos.
La decisión concede mayores derechos a la última gran petrolera estadounidense que sigue operando en Venezuela, país sancionado por Estados Unidos. Sin embargo, restringe cualquier pago en efectivo a Venezuela, lo que podría reducir el petróleo disponible para exportar.
La licencia a Chevron Corp está diseñada para evitar que la empresa petrolera estatal Petróleos de Venezuela, conocida como PDVSA, reciba las ganancias de las ventas de petróleo de Chevron. La licencia tiene vigencia por seis meses, según el Tesoro de Estados Unidos.
Más de 7,1 millones de venezolanos abandonaron su país este año según la ONU, muchos de ellos emigrando a otros países latinoamericanos o a Estados Unidos, mientras Venezuela lucha contra la alta inflación y la escasez de alimentos y medicinas. En la actualidad, más de la mitad de los emigrantes venezolanos no tienen acceso a tres comidas al día, según estimaciones de la ONU.
