Tropas de la Décima Segunda Brigada del Ejército Nacional, en coordinación con el Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía General de la Nación y con apoyo del Comando Aéreo de Combate N.º 6, de la Fuerza Aeroespacial Colombiana, ejecutaron una operación de alto impacto en los municipios de Curillo y Solita, Caquetá, contra la explotación ilícita de yacimientos mineros.
Gracias a labores de inteligencia adelantadas por el Batallón de Infantería N.º 34 Juanambú, se logró ubicar y neutralizar varios puntos de extracción ilegal sobre las riberas del río Caquetá. En el lugar fueron destruidas 3 dragas tipo 4 con sus montajes y un dragón para la extracción ilícita de oro de aluvión, maquinaria que vertía mercurio y combustibles en el afluente, generando un grave riesgo ambiental y de salud para las comunidades ribereñas.
De manera simultánea, se efectuó la captura en flagrancia de 7 personas: 3 en el municipio de Curillo y 4 en Solita. Los detenidos fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la Nación por el delito de explotación ilícita de yacimientos mineros, tipificado en el artículo 332 del Código Penal.
Según información de inteligencia, estas actividades eran financiadas y dirigidas por alias Miller o Negro Niche, cabecilla de finanzas del GAO-r Raúl Reyes, quien consolidó la minería ilegal como una de las principales fuentes de ingresos para la adquisición de material bélico y la expansión de su estructura criminal en el sur del Caquetá y zonas limítrofes.
El impacto de esta operación trasciende lo judicial y lo militar: golpea de manera directa las finanzas de la estructura residual, protege la biodiversidad y mitiga el daño ambiental sobre el río Caquetá, uno de los principales afluentes de la Amazonía colombiana.
La minería ilegal genera consecuencias devastadoras: deforestación indiscriminada, contaminación por mercurio, alteración de ecosistemas acuáticos y riesgos para la seguridad alimentaria de comunidades campesinas e indígenas. Expertos advierten que la recuperación de estos ecosistemas puede tardar décadas y, en algunos casos, los daños son irreversibles.
Este resultado refleja la articulación efectiva entre las Fuerzas Militares y la Fiscalía, que bajo el Plan Ayacucho Plus trabajan de manera sostenida para debilitar las economías ilícitas que financian a los grupos armados organizados residuales.
El Ejército Nacional reafirma su compromiso con la defensa del medioambiente, la seguridad de las comunidades y la neutralización de las estructuras criminales que afectan la región amazónica.
Finalmente, la Décima Segunda Brigada invita a la ciudadanía a denunciar cualquier actividad ilícita que atente contra la tranquilidad y seguridad regional, a través de las líneas gratuitas 147 del Gaula Militar y 107.
Con operaciones como esta, las Fuerzas Militares demuestran que su compromiso con Colombia es firme e inquebrantable, trabajando día y noche por la vida, el medioambiente y la seguridad nacional.