Por: Raúl Eduardo Barba Rueda/ Para 2016 con el inicio del cuatrienio del exalcalde Darío Echeverry se movía con gran expectativa en la ciudad, la agenda del nuevo Plan de Ordenamiento Territorial (POT).
El Acuerdo 018 de 2002, por el cual se aprobó el POT de la ciudad se encontraba a 31 de diciembre de 2015 agotada su vigencia, requiriéndose la formulación de una nueva herramienta.
La administración de Echeverry sorprendería con la elección del señor Eduardo Díaz como “gerente del POT”. Este personaje en sus primeras declaraciones afirmaría:
“…acepto con responsabilidad el reto que le espera, especialmente porque está convencido que Barrancabermeja debe abrirse a nuevas perspectivas de desarrollo como la logística y el turismo y eso solo a través de un POT donde se le puede brindar seguridad jurídica a todos aquellos empresarios que quieran invertir en Barrancabermeja”.
Sin embargo, como la gran mayoría de las actuaciones de la administración del sr Echeverry estaría plagada de irregularidades e inconsistencia, y el POT no se salvó de esta suerte.
En primer lugar, nombra supuestamente como “gerente del POT” al señor Eduardo Díaz, el cual no posee ninguna formación académica ni experiencia práctica en temas de ordenamiento territorial, un total ignorante de lo que implica ordenar el territorio.
En segundo lugar, el supuesto cargo de “Gerente del POT” que en la práctica el sr. Eduardo Díaz se ufanaba y se presentaba ante los medios locales y ante la institucionalidad de planeación nacional, nunca existió fue un titulo falso que le asignaron o él se asignó.
Cuando revisamos los contratos de prestación de servicios del señor “gerente del POT”, Eduardo Díaz encontramos que el sr. Díaz, nunca fue contratado como gerente como falsamente le hicieron creer a los medios y a la ciudadanía.
El sr. Eduardo Díaz, tuvo cuatro contratos de prestación de servicios en el periodo 2016-2019, los cuales suman un valor total de 236.300.000 millones de pesos.
En ninguno de los contratos el sr. Díaz figura como “Gerente”, de hecho, en los cuatro contratos el objeto corresponde a la prestación de servicios profesionales como Administrador de Empresas.
Un administrador de empresas que en cuatro años nos costó, repito el dato, $236.300.000 millones de pesos, sin que al 31 de diciembre de 2019 se halla logrado formular y aprobar un nuevo POT en el Puerto Petrolero.
Como dato anecdótico, el sr. Díaz es el profesional más costoso que ha tenido el POT de la ciudad de Barrancabermeja en los últimos 10 años.
Y por último, no obstante el POT contaba con los costosos servicios de un gerente, este tal parece nunca se dio por advertido de situaciones que este columnista advirtió y denunció, como fueron el Cartel de la contratación del POT controlado por la empresa contratista Walmart y el “falso pasante del POT”.
Dos casos de irregularidades descaradas al interior del proceso del POT que sucedieron bajo el mando del sr Eduardo Díaz como “dizque el gerente del POT”.
La administración de Darío Echeverry que tampoco logró formular un nuevo POT le sumó a la cuenta de gastos del proceso $9.866.730.477 millones de pesos, que a la fecha de hoy ya superó los $24.000 mil millones de pesos, mal contados $8 millones de dólares.
La actual administración de Alfonso Eljach ya le ha aportado 645.849.999 millones de pesos al proceso sin tampoco lograr su aprobación, mientras tanto los consentidos del kínder de la Lobo repiten OPS y el POT sigue en su eterno y peculiar proceso de concertación que cumple ya mas de un año y medio ante la CAS.
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*Especialista en Medio Ambiente y Geoinformática. Experiencia en Gestión Social para el sector Oil & Gas. Director de la Corporación Observatorio de Desarrollo Territorial.
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(Esta es una columna de opinión personal y solo encierra el pensamiento del autor).
