Por: Luis Alfredo Bonza Forero/ Cuando el Gobernador de Santander, Juvenal Díaz Mateus en acto firme y seguro, tomó su mandato como jefe del ejecutivo departamental, observamos venir un gobierno sensato, sereno y eficiente para el departamento, certificado en cada uno de sus denuedos en beneficio de los diferentes municipios de Santander, pudiendo resaltar su gobierno como un eficaz coadyuvante del Municipio de Bucaramanga, además por su inteligencia adquirida es prenda de garantía para su labor como digno gobernador.
A pocos días de cumplir sus cuatro meses de gobierno, el Departamento puede estar tranquilo, a pesar de las condiciones frágiles que le entregó su amargo antecesor, que solo sus mentiras son las que recuerda nuestra comunidad.
Observando un nombramiento en su meritorio gabinete, posesionó a un gran hombre cuya probidad absoluta lo identifica, es la credencial de Néstor Augusto Salcedo Silva, egregio y experto economista, experiencia en la parte administrativa, especialista en finanzas, banquero por excelencia porque tuvo el honor de ser gerente del Banco Popular, principal de Bucaramanga en 38 años de servicio, 25 de los cuales estuvo rigiendo esta gran entidad bancaria hasta su retiro voluntario por tiempo cumplido de su exitosa labor.
Su nombramiento como Gerente de Idesan es la respuesta a su impronta calificada de honestidad para el manejo de la entidad, lamentablemente el Idesan fue maltratado por un regente que solo dejó tristeza para el ente.
Lo que pasó al interior de Idesan en la parte financiera, préstamos, posibles autoayudas, lo protervo realizado; fue en un gobierno deplorable que difícilmente tocó el tema sin resultados de las investigaciones, los que tenían que renunciar lo hicieron… ¿Por el presunto delito quién responde? Gracias General Juvenal Díaz Mateus, Gobernador del departamento, por ese distinguido nombramiento.
Santander puede dormir tranquilo advirtiéndolo en esta columna, existe la fortuna de ver cómo se maneja una entidad financiera oficial, con un funcionario de la más alta condición moral, advirtiendo es el primer cargo público que asume gracias a Dios tiene su situación económica definida producto de su trabajo honesto, imparcial, y acreditado.
La posición estatal asumida por nuestro Gobernador, impidiendo que el departamento asuma una transacción con una familia cuestionada, que reclama la franquicia de Aguardiente Superior y Ron Búcaro, cuando su propietario es la Gobernación de Santander, vigilada por nuestro digno gobernante quien puso el dedo en la llaga.
Decidió el cierre de la Empresa Licorera de Santander el exgobernador en otrora, quien puede saber que pasó con ese presunto enredo con particulares que nada tienen que ver con la cosa pública, o en su defecto, quien es el responsable del conjeturable caso. Lo cierto, por el momento, las IAS tienen la palabra… esperando los buenos resultados de esta investigación fácil de dilucidar.
Gracias a Dios nuestros gobernantes departamental y municipal, están alejados de cualquier oportunista indeseable, desde su posesión y juramento se han dedicado a trabajar por Santander y su ciudad capital, al existir una comunicación permanente para atender los imprevistos que se presenten y reconstruir las obras iniciadas y no terminadas por sus antecesores, no dejando atrás la parte económica deteriorada por quienes creyeron ser dueños de un latifundio, quedando serios y posibles hechos por aclarar.
Santander está bien gobernado, Bucaramanga igual… luego, cuando hay autoridad y se trabaja por el bien común, no hay duda de existir gobernabilidad con un norte triunfador en las dos administraciones oficiales.
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*Periodista