Luego de dos semanas de cotizarse a mínimos, el precio del petróleo no es ajeno al conflicto en Medio Oriente y empezó a subir este primero de octubre justo después de que un miembro del club de países exportadores de petróleo entrara de forma directa a las hostilidades. Tras el ataque de Irán, miembro de la OPEP, el WTI de Estados Unidos subió más allá del 5% hasta los USD 71,4 y su homólogo británico más allá de los USD 75,06, para luego recuperarse levemente. En este artículo les contamos cuál es la preocupación del mercado petrolero mientras aumenta la tensión en la región de Medio Oriente.
Antes de esa noticia había una calma particular en el sector petrolero con los precios en mínimo de dos semanas, ya que las perspectivas de un aumento de los suministros y un tibio crecimiento de la demanda mundial eran mayores que los temores sobre una escalada del conflicto en Medio Oriente y su impacto en las exportaciones de crudo de la región.
Un escenario que podría repetirse y que incluso podría ser apenas el inicio de dolores de cabeza para el mercado petrolero, tal como opina Quincy Krosby, estratega global jefe de LPL Financial: «Cuanto más se intensifique el conflicto, el petróleo podría subir más a medida que aumenta el riesgo de que la respuesta militar se desvíe hacia el área productora de petróleo alrededor de Irán«.
Sucesos que se dan tan solo un día antes que el panel de ministros del grupo de productores de la OPEP+ se reúna este 2 de octubre para revisar el mercado, sin que se esperen cambios en la política.
Los precios se sacuden, pero no tanto
Aunque con el ataque iraní los ojos de economistas e inversores se volcaron a índices de referencia como el WTI y el Brent, lo cierto es que el precio al que cerró este martes 1 de octubre son significativamente bajos si se comparan con otras alzas registradas este mismo año.
El pasado 4 de abril el indicador estadounidense llegó a los 86 dólares por barril y el Brent británico para esa misma fecha superó los 90 dólares por barril.
Números altos comparados con los registrados este martes, pero todavía incluso bastante lejos del pico de los 120 dólares por barril que alcanzó el WTI el 8 de marzo y su homólogo británico los 111 dólares, cuando en ese entonces solo habían pasado unas cuantas semanas del inicio de la guerra en Ucrania.
Con un mercado tan cambiante y con el conflicto de la región todavía con una solución que no se ve tan cerca, algunos analistas creen que el precio del crudo no sufrirá tanto como lo hizo con la invasión rusa a Ucrania.
«El mercado se ha vuelto cada vez más insensible a la tensión en la región, dado que, después de casi un año de conflicto, todavía no ha habido impacto en la producción de petróleo», señala Ewa Manthey, estratega de materias primas del portal ING.