El diario The New York Times reveló este fin de semana los planes que supuestamente habría tenido el Presidente de EE.UU., Donald Trump con Venezuela. Según el diario estadounidense hubo al menos tres citas entre el gobierno del magnate y la fuerza pública venezolana que tenían como eje central un golpe de Estado. Las reuniones se habrían producido entre el otoño de 2017 y principios de este año. Lo que buscaban los militares de Venezuela era un eventual apoyo logístico por parte de Estados Unidos, que al parecer nunca se produjo.
El gobierno estadounidense no negó que hubieran tenido interlocución con los militares. Sin embargo en un comunicado de la Casa Blanca – que publicó el ‘New York Times’ – explicaban que simplemente habían entablado diálogo con todos los venezolanos que deseaban la democracia para “llevar un cambio positivo a un país que ha sufrido mucho bajo el régimen de Maduro”.
Según las fuentes del periódico los militares venezolanos ya habían buscado un acercamiento en el mandato de Barack Obama pero la invitación no fue aceptada. Sin embargo la forma de gobernar del nuevo presidente hizo que lo volvieran a intentar, logrando reunirse con el primer mandatario.
Al parecer no salió nada significativo de esas reuniones, sin embargo, no deja de ser intrigante que tanto se pudo hablar entre un gobierno tan radical como el de Trump y unos militares desesperados por la situación de su país.
El artículo escrito por Ernesto Londoño y Nicolás Casey asegura que «establecer contactos clandestinos con golpistas en Venezuela fue una gran apuesta para Washington, dado su largo historial de intervenciones encubiertas en toda América Latina».
Los rumores de una posible invasión
El pasado mes de julio, Nicolás Maduro había señalado que existía un plan para invadir Venezuela. «No puede bajar la guardia ni un segundo, porque defenderemos el derecho más grande que tiene nuestra patria en toda su historia (…) que es vivir en paz», dijo Maduro durante una ceremonia de ascensos de generales y almirantes. El planteamiento fue hecho «durante una reunión sobre las sanciones» que Washington ha impuesto al gobierno de Maduro, aseguró la cadena CNN, citando a un alto funcionario del gobierno próximo a esos comentarios.
Sin embargo, «los asesores de Trump rechazaron vigorosamente la idea, así como otros líderes latinoamericanos que supuestamente le dijeron a Trump que no querían ver una invasión estadounidense», añadió CNN.
Maduro sostuvo que estas versiones prueban la veracidad de sus denuncias de que Washington planea atacar militarmente a Venezuela para apoderarse de sus vastas reservas de crudo. «¿Casualidad? No es casualidad», afirmó el presidente, indicando que la pregunta de Trump a sus asesores se produjo «luego de una visita de opositores venezolanos a la Casa Blanca».
Trump ha sido claro en que Estados Unidos no comparte la visión del mandatario venezolano. El 11 de agosto de 2017, Trump dio señales de que consideraba una alternativa de fuerza frente a Maduro, a quien tilda de «dictador» y cuya reelección el pasado 20 de mayo desconoce. «Tenemos muchas opciones para Venezuela, incluida una posible opción militar si es necesario», dijo entonces Trump a periodistas.
La semana pasada, en una entrevista, el embajador de Estados Unidos ante la OEA, Carlos Trujillo, ante la pregunta de si estaba descartada esa intervención militar contestó: «La Casa Blanca y el presidente han dicho en varias ocasiones que todas las opciones están sobre la mesa».