Los Garzón Beltrán, son una de las familias campesinas que han sido beneficiadas a través del programa de Banco2, por su compromiso para proteger, conservar y restaurar los ecosistemas, bosques y nacimientos de agua que hacen parte de sus predios, logrando mejorar su calidad de vida y potencializando sus proyectos productivos a través de un incentivo económico en reconocimiento a su labor.
Alirio Garzón Villalba, protege la zona de reforestación en la finca Tabanares del municipio de Hato en el departamento de Santander. Con el incentivo económico que recibe por parte del programa, junto con su esposa e hijos, ha logrado ir remodelando su casa, cambiando la estructura de Guadua por techos en Machimbre, pisos y bases de cemento que les proporcionan mejor estabilidad y condiciones habitacionales dignas.
Así mismo y con la asesoría de un grupo interdisciplinario de profesionales de la CAS, vienen fortaleciendo proyectos productivos como la huerta, siembra de cítricos y piscicultura que abastece sus necesidades, además de ser la actividad laboral del grupo familiar.
Para La Corporación Autónoma Regional de Santander es satisfactorio poder contribuir a que más familias del campo mejoren sus condiciones de vida a través del programa Banco2 el cual busca estar más cerca de las comunidades y mejor conectados ambientalmente.