La Corporación Autónoma Regional de Santander -CAS- entregó al Instituto Nacional de Salud -INS- una Coral Sangileña – Micrurus Sangilensis que fue recuperada por la Policía Nacional y entregada a la Autoridad Ambiental en San Gil.
El Director General de la CAS, ingeniero Alexcevith Acosta dijo que “con esta serpiente ya son ocho que entrega la Corporación Autónoma Regional de Santander -CAS- en los últimos años al Instituto Nacional de Salud -INS- para su desarrollo en la creación de sueros antiofídicos».
“Recordemos -dijo el directivo que esta especie es endémica del municipio de San Gil, por lo que recalcamos que la preservación de la misma es de vital importancia para la ciencia y la salud pública, por tal razón hacemos el llamado a la comunidad para que acudan a las autoridades en caso de notar su presencia, y así no poner en riesgo la vida propia ni la de los ofidios”.
El médico veterinario zootecnista, Luis Emilio Atuesta, funcionario de la CAS, dijo que entregaban una Micrurus Sangilensis Juvenil, “una serpiente supremamente venenosa y de mucho riesgo para la población humana”.
Con esta completaron ocho Micrurus Sangilensis entregadas al Instituto Nacional de Salud -INS- por parte de la Corporación Autónoma Regional de Santander -CAS-. Este año lleva la CAS dos entregadas.
“Para el INS es muy importante recibir estas especies y para la CAS porque el interés es de salud pública”, dijo el médico.
Carlos Antonio Castro Sandoval, del Instituto Nacional de Salud -INS-, dijo que “las serpientes del tipo Micrurus son serpientes muy pequeñas, por ende también poseen muy poquito veneno”.
“Las cantidades de veneno que requieren para hacer las diferentes pruebas en el INS son bastantes, entonces requieren de una cantidad bien importante y de por sí varios especímenes en diferentes estados de desarrollo biológico. Vamos a requerir, junto con las otras serpientes, que acá la CAS nos ha aportado, a continuar con el fortalecimiento de nuestras actividades investigativas”, dijo el funcionario del INS.
El médico veterinario zootecnista, Luis Emilio Atuesta, funcionario de la CAS, dijo que en el año se están presentando al menos unos 4.500 accidentes ofídicos. “Cuando se aplica un suero antiofídico trátese para víboras o para corales el tiempo es oro y ahí está en juego la vida de esa persona mordida por esa serpiente”.
Dijo además que “los efectos de los venenos son diferentes. El de la víbora produce necrosis de tejidos, caída de párpado, etcétera, cosa que el médico le es fácil para que escoja puntualmente el suero antiofídico que hay que aplicarle a ese paciente”.
Carlos Antonio Castro Sandoval, del Instituto Nacional de Salud -INS-, dijo que “todas las entidades en donde hay incidencia de serpientes deben de tener en su paquete de medicamentos el suero antiofídico”.
El médico veterinario zootecnista, Luis Emilio Atuesta, funcionario de la CAS, dijo que “seguimos contribuyendo desde la CAS con la donación de estas serpientes al INS en aras de cubrir esos servicios de salud pública que también maneja el INS con la producción de estos sueros antiofídicos, anti víboras y anti corales”.