Este martes, el volcán Sundhnúkagígar, ubicado en el suroeste de Islandia, comenzó a entrar en erupción. Es la octava vez, desde diciembre del año 2023, que el volcán entra en erupción.
La Oficina Meteorológica de Islandia (OMI) informó que la «fisura eruptiva» alcanzó los 1,200 metros y que nuevas grietas han surgido dentro de las barreras protectoras al norte de la localidad.
Lava y nubes de gas se elevaban en el aire después de que la fisura volcánica se abriera cerca de la ciudad de Grindavík, donde unas 40 casas han sido evacuadas, informó el medio nacional RUV. La comunidad, ubicada en la península de Reykjanes, fue evacuada en gran parte hace un año cuando el volcán despertó después de haber estado inactivo durante 800 años.
Las autoridades han reiterado la orden de evacuación, aunque algunas personas permanecen en al menos siete u ocho viviendas. El comisario de policía de la región, Ulfar Ludviksson, instó a los residentes a abandonar el área de peligro. Adicionalmente, el famoso spa Blue Lagoon cerró temporalmente debido a la actividad volcánica.
Grindavik, que contaba con 4,000 habitantes, ha visto a la mayoría de su población desplazarse desde finales de 2023.
Islandia alberga 33 sistemas volcánicos activos, más que cualquier otro país europeo. Está situada en la dorsal mesoatlántica, una falla en el fondo del océano que separa las placas tectónicas euroasiática y norteamericana y provoca terremotos y erupciones.