Un mes de plazo tendrán los expendedores de carne en Piedecuesta para ponerse al día en todos los requerimientos del Decreto 1500, así lo explicó Yorguin Quintero Uribe, funcionario de la Secretaria de Salud municipal de Piedecuesta.
La declaración del funcionario de la Secretaría de Salud la hizo este lunes 15 de marzo de 2021 cuando un equipo de la entidad cumplió labores de verificación en diferentes expendios del producto en la zona urbana.
Según la información que conoció Corrillos! al respecto de la actividad de la Secretaría de Salud municipal se trataría de controles permanentes al expendio de carne en Piedecuesta que realizan equipos de la secretaría de Salud local con el propósito de verificar el cumplimento de las medidas higiénico – sanitarias en los mayores centros de comercialización de la jurisdicción.
Yorguin Quintero Uribe, funcionario de la Secretaria de Salud municipal de Piedecuesta, en una versión extendida de sus declaraciones dijo que “La idea es que todos los establecimientos de expendios de carnes cumplan con la temperatura de refrigeración establecida en el Decreto 1500”.
De igual forma recordó que entre otros aspectos a verificar por el equipo de la Secretaría está por ejemplo el de que “las carnes no deben estar expuestas. Se está verificando de igual forma que los expendedores tengan la dotación, tengan la cofia (indumentaria)”.
Además verifican “que existan las condiciones y los hábitos apropiados para garantizar que esta carne sea apta para el consumo humano”.
Quintero Uribe informó que “Se les está otorgando a los expendedores de carne un tiempo prudencial de treinta días para que ellos vayan realizando las gestiones de mejora”.
Sin embargo señaló que “Ese plazo es para permitir que entren a cumplir todos los puntos establecidos en el Decreto 1500 pero si en la próxima visita se verifica que no cumplen o que no adelantan las gestiones para dar cabal cumplimiento a lo exigido para la venta de carne, se procederá ya a realizar medidas de seguridad sanitaria”.
Aunque no lo dijo dejó percibir que esas medidas podrían llegar a ser tan contundentes como la de sellar el establecimiento y hasta decomisar el producto que no esté apto para el consumo humano. Aunque, como lo dijo el mismo funcionario, tienen un mes para ponerse al día en el reglamento, así que no se trata de medidas coercitivas sino de control y cumplimiento en procura del bienestar de la salud de los piedecuestanos y santandereanos.