Un panorama difícil para el Partido Alianza Verde no solo en Colombia sino ahora también en Santander.
En Colombia, al fundador del Partido Alianza Verde, Carlos Ramón González, la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá le profirió una orden de captura. Al exdirector del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (Dapre), le profirieron la orden de captura en desarrollo de la actuación penal que cursa por presuntas conductas delictivas relacionadas con el caso de corrupción al interior de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
Ahora en Santander a Ferley Sierra, una de las figuras representativas del Partido Alianza Verde y quien ha izado en lo más alto, según sus expresiones, la bandera contra la corrupción, le sobreviene una investigación.
El exdiputado y excandidato a la Gobernación de Santander por el partido Verde, comenzó a ser investigado por el Consejo Nacional Electoral (CNE), debido a que se presumen ciertas irregularidades en la financiación de su campaña de 2023 cuando quiso ser Gobernador de Santander, disputa que perdió con Juvenal Díaz Mateus, actual mandatario departamental.
La investigación contra Sierra tiene que ver con dineros para su campaña. Se investiga, por ejemplo, que su campaña habría exacerbado sus gastos en cuanto que reportó donaciones que llegaron hasta los 490 millones de pesos. Esos dineros además habrían sido registrados como gastos a la hora de presentar las cuentas claras.
Otro de los puntos particulares se refiere a lo que podría querer al obtener la reposición de los gastos de campaña, esto es el dinero que se entregaría por cada voto válido depositado cuando aspiró a la Gobernación de Santander en 2023. De lograr esa reposición y se comprueba que no es legal podría incurrir en lo que expertos denominan fraude procesal.
Sierra se defiende y no solo porque haya enarbolado la bandera contra la corrupción sino porque señala que esta acusación no es más que un montaje judicial, justamente ahora que se aproxima la jornada electoral 2026 y por ello quieren desde ahora desprestigiarlo, según destacó.
El exdiputado y excandidato a la Gobernación siempre ha defendido su posición en cuanto a que hizo una campaña sin incurrir en mayores gastos y que en Cuentas Claras están disponibles los informes que fueron presentados a su tiempo.
Sin más articulaciones que las necesarias no duda en manifestar que entre el gobernador de Santander y el alcalde de Bucaramanga estarían las figuras que lo atacarían.
Sobre el gobernador Díaz Mateus desde la misma campaña se observaron roces y amenazas de denuncias por injuria y calumnia, sin embargo, del alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán Martínez, si hay roces o señalamientos los mismos no han sido viralizados y se mantienen con bajo perfil.
Lo que hace al momento el CNE es una fase preliminar de indagación, recopilando pruebas y verificando si hay méritos para abrir una investigación formal. Solo de comprobarse que haya posibles irregularidades, podrían derivarse sanciones administrativas, fiscales o penales, de lo contrario no avanzaría a la siguiente instancia.
De darse un avance en la investigación que afecte a Ferley Sierra y en concordancia al Partido Alianza Verde podría darse una reconfiguración de fuerzas políticas en Santander, más si se tiene en cuenta que estamos ad portas de un año electoral como es el 2026.
La sola investigación no marca el pasado judicial, pero ese camino que está en curso puede afectar el discurso anticorrupción que Sierra ha promovido, lo que podría llevar a perder un fuerte peso en su base constitutiva de lo que es su movimiento.
Así que mientras el Partido Alianza Verde se erosiona, los partidos que miran desde la barrera pueden intentar pescar en río revuelto y reforzarse con fuerzas ajenas pero que al momento de una elección pueden ser definitivas.
Frente a esta situación específica de la reposición de votos y sus presuntas irregularidades, revive el debate sobre la falta de transparencia en la financiación de campañas y aumentaría el escepticismo político en la ciudadanía.