La mayor tragedia de migrantes en el Canal de la Mancha desde que se comenzó a recopilar datos en 2014 enfrenta hoy a los gobiernos de Francia y el Reino Unido.
El primer ministro británico, Boris Johnson, renovó sus llamados a Francia para que acepte la vigilancia de fuerzas armadas de los dos gobiernos a lo largo de la costa del Canal de la Mancha, la estrecha vía marítima que separa a ambos países.
Johnson aseguró que el ahogamiento de al menos 27 personas, el miércoles 24 de noviembre cuando intentaban cruzar hacia territorio británico, demuestra cómo los esfuerzos de las autoridades francesas para patrullar sus playas “no han sido suficientes”.
El líder conservador dijo sentirse “conmocionado” y consternado” por los fallecimientos y pidió a París que haga más para disuadir a los extranjeros de atravesar el Canal. Según Johnson, las bandas de tráfico de personas “literalmente se salen con la suya”.
«Hemos tenido dificultades para persuadir a algunos de nuestros socios, en particular a los franceses, de hacer las cosas de la manera que creemos que la situación merece (…) Entiendo las dificultades que enfrentan todos los países, pero lo que queremos ahora es hacer más juntos, y esa es la oferta que estamos haciendo», sostuvo Johnson horas después del incidente.
Reino Unido ha acusado en las últimas semanas a la Administración de Macron de mantenerse al margen del flujo migratorio por el Canal mientras miles de migrantes parten desde sus costas, señalamientos que Macron rechaza.
«Francia no permitirá que el Canal se convierta en un cementerio», aseguró el mandatario francés.
Macron pide a Johnson no “politizar” con el flujo de migrantes
París se ha rehusado a ofertas previas del Reino Unido de enviar policías y agentes de la Fuerza Fronteriza que patrullen de manera conjunta, en medio de preocupaciones sobre lo que esa acción representaría para su soberanía nacional.
El miércoles, en una comunicación telefónica con Johnson, Macron enfatizó en la “responsabilidad compartida” de las dos naciones en la situación, pero también señaló que Londres debe dejar de “politizar” con el tema migratorio para obtener beneficios internos.
Además, el ministro del Interior francés, Gerald Darmanin, aseguró que el Gobierno británico tiene que ser parte de la respuesta.
Por otra parte, el líder del Elíseo pidió una reunión de emergencia con ministros de la Unión Europea (UE) para discutir los próximos pasos a seguir. El mandatario francés defendió que la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) debe obtener más recursos financieros para proteger los límites exteriores del bloque de los 27 países y evitar así que los migrantes se reúnan en las costas del norte de Francia.
Si bien las autoridades francesas han impedido más cruces irregulares que en años anteriores, solo ha detenido parcialmente el flujo de migrantes que desean llegar a Reino Unido.
Recuperar el control de sus fronteras fue una razón fundamental para los simpatizantes del Brexit antes del referéndum de 2016 y este sigue siendo un punto de fricción entre Londres y París.
Migrantes por el Canal de la Mancha registran cifras récord
Este jueves 25 de febrero, las autoridades confirmaron que, entre los al menos 27 muertos por el naufragio del bote en el que se transportaban por el Canal de la Mancha, hay mujeres embarazadas y tres niños.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) indicó que se trata de la mayor pérdida de vidas desde que empezó a recopilar datos de los tránsitos de migrantes por esa vía marítima hace siete años.
Dos sobrevivientes se encuentran en cuidados intensivos, tras presentar hipotermia severa.
Según las autoridades francesas, la mayoría de los ocupantes de la embarcación eran personas kurdas, provenientes de Irak e Irán.
La reciente tragedia pone en relieve los fallecimientos acumulados de migrantes en el Canal, que este año han representado cifras récord.
El pasado 11 de noviembre, un total de 1.185 personas llegaron a Inglaterra en barco, la mayoría en un solo día. Y más de 25.700 han realizado el peligroso viaje hacia el territorio británico en pequeñas embarcaciones en lo corrido de este año, tres veces el total de todo 2020, según cifras oficiales.