La alcaldía de Barrancabermeja marcó un hito importante para la educación en el distrito con la apertura del primer grado prejardín, en una institución educativa pública. El plan piloto se ejecuta en el colegio Diego Hernández de Gallegos, que este año sumó a su comunidad educativa 35 niños y niñas de 3 años que hoy disfrutan de un entorno lleno de juego, aprendizaje y socialización temprana, para sembrar la semilla de la paz en estos pequeños. Con esta iniciativa la Administración distrital le apuesta a fortalecer la educación preescolar en Barrancabermeja y se une a los avances que ya se han logrado en los grados de jardín, con 696 estudiantes, y transición con 2.161 beneficiados, matriculados en 2025.
La implementación de este grado ha sido posible gracias al acompañamiento técnico y pedagógico de la Secretaría de Educación, en articulación con directivos y docentes comprometidos con el desarrollo de ambientes protectores, afectivos y creativos. La apuesta pedagógica se fundamenta en las actividades rectoras: el juego, el arte, la literatura y la exploración. La gestora social, Laura Cristina Ahumada, acompaña este importante proceso, que ahora se convierte en un ambiente de formación integral para estos niños.

“Seguimos creyendo en nuestros niños y niñas, en los más pequeños. Yo que soy madre de un infante de 3 años, veo cómo los niños y las niñas escolarizados son mucho más felices, son niños que socializan, son niños que tienen la oportunidad de desarrollar más habilidades, por eso seguimos construyendo ese camino pedagógico junto a los padres y maestros, porque la inseguridad de la ciudad no solo se combate con más policías y más cemento, sino también con amor y educación de calidad para nuestros niños, niñas y adolescentes”, manifestó la gestora social Laura Ahumada.
Por su parte, Derly Aldana, directora de Calidad Educativa de la Secretaría de Educación, consideró que esta prueba piloto es un ejercicio significativo para la educación inicial del distrito, pues tiene disponibles jornadas en la mañana y la tarde para atender a los 35 niños beneficiados. “Es un beneficio colectivo pues los padres se sienten acompañados en el desarrollo de sus hijos”, acotó.