El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, declaró este miércoles (18 de junio de 2025) que la República Islámica no cederá ante las exigencias del presidente estadounidense Donald Trump, quien recientemente hizo un llamado a una rendición incondicional por parte de Teherán.
A través de un mensaje televisado, Jamenei afirmó que ni la guerra ni la paz pueden ser impuestas a Irán desde el exterior. “Quienes conocen la historia de nuestra nación saben que no se puede hablar con Irán en tono de amenazas”, expresó.
Además, según información de Reuters, advirtió que cualquier acción militar directa de Estados Unidos traería “consecuencias irreversibles”.
La declaración se produce en medio de una creciente crisis en la región. Durante la madrugada del miércoles, al menos 50 aviones de combate israelíes bombardearon unos 20 objetivos en la capital iraní, entre ellos instalaciones vinculadas a la producción de misiles.
El ataque provocó una ola de pánico entre la población, y miles de residentes comenzaron a abandonar Teherán ante el temor de una escalada mayor.
Fuentes cercanas al gobierno estadounidense revelaron que la administración Trump está evaluando opciones que incluyen una posible participación militar conjunta con Israel en ataques contra instalaciones nucleares iraníes, informó Reuters.
En respuesta, el embajador iraní ante la ONU en Ginebra, Ali Bahreini, advirtió que su país considerará a Estados Unidos como responsable directo si se une a las operaciones militares. “Ya vemos a EE. UU. como cómplice de las agresiones israelíes”, afirmó el diplomático.
Mientras tanto, la comunidad internacional observa con preocupación el deterioro acelerado de la situación, mientras aumentan los temores de un conflicto a gran escala en la región.
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