Entre enero y junio la Inversión Extranjera Directa (IED) que llegó al país se cuantificó en US$5.889 millones, eso es casi 78% más que en el primer semestre de 2021 US$3.315 millones), y muy superior al periodo prepandemia, pues entre esos meses de 2019 la cifra llegó a US$4.940 millones.
Pero visto de otra forma, en 2015 fueron más de US$6.000 millones, es decir que marcó un nuevo nivel que no era tan alto desde hace siete años.
Abril fue el mes de ese primer semestre que más aportes a la IED registró, con un total de US$1.736 millones, un efecto de los precierres de años fiscales de empresas multinacionales especialmente de la industria de la energía y extracción de commodities.
Pero también se registró un alza frente al año pasado, y naturalmente versus la época de pandemia, porque muchas compañías reservaron capital para ejecución de proyectos, los cuales se habían aplazado y seguramente se materializaron durante enero junio de 2022.
Precisamente al revisar las fuentes de los recursos, las inversiones en su mayoría llegaron por la industria de petróleo y minas, fue más del 80% de la IED total, quedando entre enero y junio en US$4.108 millones. Mientras que otros sectores significó US$1.780 millones.
El reporte de Balanza Cambiaria del Banco de la República, también detalló que la Inversión Extranjera de Portafolio en Colombia (Iedp) llegó a US$1.754 millones, alza de 34%; mientras que la inversión de Colombia en el exterior se contrajo en US$1.122 millones, aunque inferior a los -US$626 millones del primer semestre de 2021.
Para los analistas, las cifras de la Balanza Cambiaria del primer semestre reflejan la solidez macroeconómica y los atractivos de Colombia como destino de inversión y de negocios para los inversionistas.
