Por: Deivy Fernando Vega Herrera/ La promesa de seguridad que en campaña Jaime Beltrán vendía como una realidad inminente, hoy está reducida a un eslogan vacío. Aunque Beltrán asumió la alcaldía con la promesa de una “Bucaramanga segura”[1], el año pasado se convirtió en el más violento de los últimos 15 años, con un preocupante incremento en los homicidios[2]. Ante estos resultados, Beltrán admite que la seguridad no está en sus manos y ahora sostiene que “debe ser un tema conjunto de los alcaldes con el Gobierno nacional”[3].
Si la inseguridad no depende del alcalde, ¿de quién depende? Aunque políticos como Jaime Beltrán suelen llegar con la promesa de cambiar las cosas, la mayoría de los cambios sociales no dependen exclusivamente de lo que haga o deje de hacer un político. Es verdad que una política eficiente puede mejorar la seguridad, pero la política por sí misma no transforma de manera automática las condiciones económicas y sociales. Como ha destacado el sociólogo David Garland[4], se tienen que coordinar una serie de factores para que se pueda generar un cambio social, y la mayoría de las veces, esta coordinación no depende del político de turno.
A pesar de estas limitaciones, Jaime Beltrán hizo campaña para la alcaldía con su lema de seguridad. Su promesa era clara: a partir de enero de 2024, la ciudad vería un cambio radical en seguridad[5]. Para ello, anunció con bombos y platillos el llamado «Plan Candado», una estrategia que supuestamente contendría la criminalidad[6]. Todo esto contribuyó a vender la falsa idea de que del alcalde de turno depende qué tanta inseguridad se siente en una ciudad, lo cual simplifica un problema complejo que en realidad está determinado por factores estructurales, sociales y económicos que trascienden cualquier administración municipal.
Pero la realidad golpeó con fuerza las promesas del alcalde Beltrán. A pesar de sus anuncios, Bucaramanga vivió en 2024 uno de sus años más violentos en décadas, con un alarmante aumento en los homicidios, superando con creces las cifras de la administración anterior(2). Si bien algunos delitos como el hurto registraron una disminución, el repunte de los asesinatos se convirtió en el problema central de la ciudad[7], y cuestiona hasta qué punto programas como el “Plan candado” han generado un cambio real.
Ante esta innegable realidad, Jaime Beltrán optó por la salida fácil: culpar al gobierno de Petro[8]. A pesar de lo prometido en campaña, Beltrán admitió que la crisis de seguridad no es responsabilidad de su administración, sino de las políticas nacionales(3). Esta postura de Beltrán deja en evidencia una verdad incómoda: la seguridad no es un asunto que dependa exclusivamente de un político local ni de un plan de gobierno municipal. Si el argumento es que el aumento de homicidios es culpa de Petro, ¿qué sentido tenía su promesa de campaña de devolverle la seguridad a Bucaramanga?
No obstante, el aumento de homicidios es posiblemente el menor de los problemas que enfrenta Beltrán. Recordemos que esta alcaldía está acusada formalmente de corrupción por permitir el robo de 23 mil millones de pesos en chatarra del Alumbrado Público, según la contraloría[9]. Este hallazgo, junto a otras denuncias de corrupción por sobrecostos en contratos[10] o contratos a dedo[11], pone en evidencia que los problemas del gobierno de Beltrán van más allá de la seguridad y alcanzan la esfera de la corrupción institucional.
En otras palabras, Jaime Beltrán no solo incumplió su promesa de seguridad, sino que también fracasó en su compromiso con la transparencia y en la lucha contra la corrupción. Los bumangueses debemos aprender que un político por sí mismo no es la solución a los problemas de la ciudad, por más que en campaña intenten vendernos lo contrario. Que hoy la responsabilidad de la inseguridad recaiga en el gobierno Petro nos ayuda a entender que el político que promete seguridad en campaña nos está mintiendo. Creer que un político resolverá mágicamente la inseguridad solo garantiza una cosa: que sigamos cayendo en la misma trampa una y otra vez.
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*Economista y Magíster en Economía y Desarrollo. Asesor pensional independiente con experiencia certificada con Colpensiones y empresas privados. Investigador interesado en la academia. Docente universitario.
(Esta es una columna de opinión personal y solo encierra el pensamiento del autor).
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[1] Alcaldía de Bucaramanga (febrero de 2024). Bucaramanga Segura. Alcaldía de Bucaramanga.
[2] Marianne Rincón (septiembre de 2024). Bucaramanga registra el año más violento en una década con un alarmante aumento de homicidios en 2024. Canal TRO.
[3] Danilo Pérez (febrero de 2025). “La seguridad debe ser tema conjunto de Alcaldes con el Gobierno nacional”: Alcalde Jaime Andrés Beltrán. El Frente.
[4] Garland, D. (2001). The culture of control: Crime and social order in contemporary society (Vol. 77). Oxford university press.
[5] Alcaldía de Bucaramanga (enero de 2024). Desde el primer minuto de su gobierno alcalde de Bucaramanga Jaime Andrés Beltrán ordenó garantizar seguridad en la ciudad. Alcaldía de Bucaramanga. Alcaldía de Bucaramanga.
[6] Alcaldía de Bucaramanga (enero de 2024). Alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, lanza ‘Operación Candado’ para garantizar la seguridad ciudadana. Alcaldía de Bucaramanga.
[7] Melissa Múnera (septiembre de 2024). Las cifras de homicidio en Bucaramanga que reveló Petro y pone en ‘jaque’ la propuesta de seguridad y ‘plan candado’ de Jaime Beltrán. El Tiempo.
[8] Juan Camilo Rodríguez Parrado (febrero de 2025). Concejal arremetió contra el Bukele colombiano por la inseguridad en Bucaramanga: “Ojalá no nos digan que fue culpa de Petro”. Infobae.
[9] Javier Flórez (noviembre de 2024). Contraloría determina hallazgos por $23.000 millones y vincula a alcalde y exalcalde por pérdida de chatarra en Alumbrado Público. Metropolitano.
[10] Laura Basto Contreras (septiembre de 2024). Denuncian presuntos sobre costos en contratos firmados por la Alcaldía de Bucaramanga. W Radio.
[11] Melisa Múnera Zambrano (julio de 2024). Aumentan las denuncias con fundación para atender niños con discapacidad en Bucaramanga: revelarían diplomas falsos y certificados exprés. El Tiempo.
