El senador liberal Jaime Durán Barrera, denunció posibles irregularidades en la convocatoria de concurso público para conformar las ternas y posterior nombramiento de 19 directores territoriales de Invías, incluyendo Santander.
El congresista elevó la queja al Procurador General, Fernando Carrillo, advirtiendo que el proceso en mención está repleto de falencias y sospechas sobre su transparencia, legalidad y pertinencia.
En carta enviada al Jefe del Ministerio Público, Durán Barrera dijo que en dicho concurso de «méritos” se pretende apartar del proceso de evaluación a la Universidad Nacional de Colombia, que las hizo en las tres anteriores convocatorias. Igualmente, “se ha dejado a un lado al Departamento Administrativo de la Función Pública, entidad idónea para sacar adelante estos procesos”, destacó.
Aseveró que desde que se convocó el concurso por parte de la Dirección General de Invías, se notó falta de planificación y rigor jurídico al momento de establecer las reglas del concurso y sobre la pertinencia de remover algunos Directores Territoriales que gozan de ciertas garantías de estabilidad laboral.
En el tema puntual de las entrevistas resalta que las reglas del concurso no especifican las personas ni institución en llevarlas a cabo, tras señalar que “dichas pruebas son altamente subjetivas, por consiguiente se requiere la mayor idoneidad, garantía de imparcialidad y neutralidad de quien las realice”.
Aclaró al Procurador, que la prueba de conocimiento es excesivamente alta, “toda vez que en el pasado era del 40% y en esta se pretendió que fuera del 70 %, y ante los reclamos ciudadanos, se bajó al 60%”.
Lo grave, para el congresista santandereano, es que “el concurso está direccionado para nombrar recomendados de cierto sector político”, dejando entrever que detrás de las irregulares situaciones estaría la propia Vicepresidenta de la República, Martha Lucia Ramírez.
Y fue más allá, afirmó que para el caso de Santander, “ya es vox populi, que quien resultará ungido de ese concurso es el señor Edgar de Jesús Rojas Ramírez”, quien hizo parte de la administración del alcalde de Floridablanca, Héctor Mantilla, mandatario muy cercano a la Vicepresidenta.
Ante esta situación, Durán Barrera le pidió al Procurador Carrillo que “a sabiendas de su férrea voluntad por alcanzar la moralidad administrativa, le haga un especial seguimiento a este concurso y logre tomar las medidas que estime pertinentes, con el fin de establecer un proceso donde la legalidad, el debido proceso, la igualdad, la imparcialidad, la transparencia y otros caros principios de la administración pública, brillen en este particular asunto”.