La administración municipal, a través de la Secretaría de Infraestructura, ha adelantado las debidas reuniones con miembros de la comunidad educativa y estudiantil, para poder llegar a un acuerdo sobre lo que desean sea construido en los escombros del demolido teatro.
El Dámaso Zapata es de los colegios más emblemáticos y antiguos de la ciudad de Bucaramanga, su historia y legado, ha logrado graduar a cientos de generaciones, educándolos con bases técnicas, y con amplia experiencia en ramas como el dibujo técnico, la mecánica y las nuevas tecnologías.
Sin embargo, la obra que se ejecutaba por fases en esta institución, no logró avanzar hasta la tercera etapa, debido a que, sin concertación comunitaria, el contratista demolió el teatro sin identificar qué estructura reemplazaría este lugar de convivencia, que estuvo en pie por más de cien años.
El subsecretario de Infraestructura, Jorge Alejandro García Henao, lanzó un llamado a todos los involucrados de la comunidad educativa: “esta semana tuvimos una sesión, de varias que se han adelantado con la comunidad, se pretenden consolidar las necesidades para el desarrollo del proyecto, en su fase 3; hemos entregado productos, pero estos no han sido fructíferos porque no hay concertación comunitaria”.

La administración hizo un llamado al diálogo, el respeto y la responsabilidad, para que, en articulación, el desarrollo de esta obra sea un trabajo consensuado, sin pasar por alto las necesidades del plantel educativo, sino que, por el contrario, sea enmendada la falta de planeación que tuvo el gobierno anterior, dijo.
“Nuestro compromiso de seguir trabajando es latente, en este momento estamos concertando el plan básico de implantación, que es, llevar a cabo la idea del empréstito y la idea de la Fase 3 del proyecto, seguimos trabajando de la mano con los actores que participan activamente por esta obra”, concluyó García Henao.