Mañana se restablecerán las relaciones entre Colombia y Venezuela con la reapertura de una frontera de más de 2.000 kilómetros, la más amplia para las dos naciones.
Desde julio, los presidentes Gustavo Petro y Nicolás Maduro empezaron a dar los primeros pasos para que los países repararen las relaciones rotas desde 2009.
Precisamente, este año se esperan mover US$1.200 millones, lo que significaría que en total el comercio tendría un aumento de entre 8% y 10% respecto al año anterior. En todo 2023 la cifra aumentaría a US$2.200 millones, según estimaciones del Ministerio de Comercio de Colombia.
Para este lunes se tiene planeado un acto protocolario en el puente Simón Bolívar que conecta a Norte de Santander con el estado de Táchira en el vecino país, con el paso simbólico de unos camiones de carga que marcarán el reinicio de las relaciones comerciales.
El transporte y los alimentos, serán los primeros sectores en beneficiarse con la reapertura. Desde el pasado jueves empresas como Colombina, Superalimentos, Nutresa y Grupo A, empezaron a cargar sus mercancías en Cúcuta y mañana, después del evento protocolario, empezarán a transitar por el puente a Venezuela.
Las empresas venezolanas también empezarán importar papel higiénico, confitería, polietileno, caja de cartón corrugado, vasos plásticos, material quirúrgico, elementos de aseso, materias primas para la industria venezolana.
Mientras que el vecino país tiene previsto exportar a Colombia 30 toneladas de carbón térmico, 10 toneladas de café procesado, bolsas plásticas, bobinas de aluminio y fresas congeladas, según dijo el gobernador del Estado Táchira, Fredy Bernal, a RCN Mundo.
Pero retomar las relaciones con Venezuela no se limita únicamente a la reactivación comercial. Hay varios retos que se deben abordar, luego de siete años sin ningún tipo de comunicación entre ambos países.
Regularización de los migrantes
De los 6,8 millones de venezolanos refugiados y migrantes en todo el mundo, 2,5 millones están viviendo en Colombia y algunos lo hacen de forma irregular. Uno de los principales retos para las administraciones será la regularización de los migrantes en ambos países y qué pasará con los venezolanos que están en proceso de obtener el Estatus Temporal de Protección.
Hay 1,2 millones de venezolanos que están en proceso de obtener este pase, que tiene como objetivo la regularización de inmigrantes provenientes del país vecino hasta por 10 años, una medida implementada por el Gobierno de Iván Duque.
El beneficio les permite trabajar legalmente en el país, atenderse en el sistema de salud y acceder a la justicia, entre otros derechos básicos.
Proceso de paz con el ELN
Desde que se cortaron las relaciones entre las dos naciones, se ha vuelto habitual que los que cometen crímenes en un país, pasan ilegalmente la frontera para aprovechar la falta de comunicación y esperando que el acto quede impune.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, le pidió a su homólogo Nicolás Maduro que sea garante del proceso de paz con el ELN. Según el mandatario, la razón de escoger a Maduro, es porque en ese país están concentrados muchos de los criminales más buscados.
Los campamentos del ELN, de la Segunda Marquetalia, y de las demás disidencias están instaladas en las zonas limítrofes, para aprovechar la porosidad de la frontera.
Desde Bogotá, la alcaldesa Claudia López también solicitó una mayor cooperación en Venezuela para procesar a cabecillas de bandas delincuencias de microtráfico en la capital del país, como los del denominado Tren de Aragua.
