Los videos de seguridad, testimonios de las personas en el lugar y una recompensa de 50 millones de pesos, son hasta ahora las más fuertes herramientas que tienen las autoridades para dar con el paradero de la exsenadora Aída Merlano, quien se fugó mientras asistía a una cita odontológica en el norte de Bogotá.
Con la información recaudada hasta ahora, según los investigadores, la Fiscalía prepara las primeras órdenes de captura de los presuntos implicados en el plan de fuga.
Aida Merlano, quien fue condenada recientemente por la Corte Suprema de Justicia por los delitos de concierto para delinquir agravado, corrupción al sufragante, en calidad de coautora y tenencia ilegal de armas, descendió por una soga desde un consultorio ubicado en el tercer piso en el edificio donde aparentemente era atendida y abordó una moto con rumbo desconocido.
Fuentes oficiales señalaron que con esas primeras evidencias y los videos de seguridad recolectados en el lugar se va a sustentar la complicidad de varias personas con el plan de escape.
También se conoció un video de una cámara de seguridad en el consultorio en el que se observa a la excongresista acompañada del odontólogo que la atendía, Javier Guillermo Celis, además de la auxiliar del consultorio y dos mujeres jóvenes, hijas de la excongresista.
Todos, ahora, quedaron cobijados bajo investigación penal por el delito de fuga de presos.
También se conoció que durante la ejecución de la fuga hubo distracción de los guardianes del Inpec que custodiaban a la exsenadora, incluso se supo que se cambió de ropa antes de salir del sitio.
Fuentes oficiales señalaron que el odontólogo fue identificado como Javier Guillermo Celis Barajas. Igualmente señalaron que era sometida a un tratamiento de diseño de sonrisa.
Representantes del sindicado del Inpec señalaron que a la excongresista Merlano se le redujo el nivel de seguridad lo que habría facilitado la fuga.