Si bien la mayoría de las acciones de las llamadas ‘Big Tech’, los pesos pesados de la tecnología, han subido en las últimas semanas, en general ha sido un año sombrío para el sector, después de un extraordinario 2020 ayudado por la pandemia del Covid-19.
Se estima que Netflix, Meta Platforms, Amazon, Microsoft, Alphabet y Apple ya han perdido un valor de mercado combinado de 2,5 billones de dólares en lo que va del año. Y esta semana, de presentación de resultados del tercer trimestre, augura un panorama incluso peor.
Las acciones de Microsoft y Alphabet (matriz de Google) comenzaron la jornada de este miércoles cayendo entre el 7% y el 9%, respectivamente, después de mostrar resultados el martes. Meta Platforms inició la jornada con pérdidas del 4%.
La mala hora de las tecnológicas
En el tercer trimestre de 2022, la matriz de Google, que es la plataforma de publicidad digital más grande del mundo por participación de mercado, decepcionó a Wall Street y tuvo una caída en sus ingresos netos a 13.910 millones de dólares, desde los 18.940 millones de dólares del año anterior, ya que las ventas de anuncios se mantuvieron débiles.
En tanto, la inflación y un dólar fuerte llevaron a Microsoft a reportar su crecimiento más lento en cinco años, pese a haber obtenido más de 50.000 millones de dólares en ingresos en su primer trimestre fiscal de 2023 (que terminó en septiembre).
Estos resultados marcaron la pauta para los de otros gigantes tecnológicos como Meta Platforms (matriz de Facebook), Amazon y Apple, previstos para informar entre este miércoles y jueves.
Dado que los analistas predicen un retroceso en los presupuestos de publicidad debido al aumento de los precios, los inversores temen que el negocio de Meta pueda verse presionado, ya que sus ingresos dependen en gran medida de los anuncios.
La situación de las grandes tecnológicas es una de las consecuencias de un dólar fuerte y una demanda débil, en un contexto de alta inflación y aumento de los costos de endeudamiento. También son una especie de termómetro que indica qué tan cerca está el mundo de una recesión.