La cantidad de personas que viajaron a China antes del Año Nuevo Lunar se desplomó desde hace dos años cuando las restricciones del coronavirus frenaron la mayor migración interna anual del mundo.
La celebración de siete días, que comenzó el jueves, es la fiesta nacional más importante de China y suele estar marcada por grandes reuniones familiares. Millones de trabajadores viajan tradicionalmente, a veces miles de kilómetros desde Beijing y otras ciudades importantes, a sus lugares de origen en regiones remotas.
Los datos del Ministerio de Transporte, el gigante chino de Internet Baidu Inc y la firma de análisis de viajes ForwardKeys mostraron una fuerte caída en el porcentaje de 1,450 millones de habitantes del país que viajaron este año.
Con unos 48 millones más de personas que se espera que permanezcan en 36 ciudades importantes este año en comparación con años anteriores, según el Ministerio de Comercio, las empresas de servicios públicos y las salas de cine se están preparando para una mayor demanda.
Los datos del Ministerio de Transporte mostraron una caída del 70% en el número de viajes de pasajeros en todo el país en las dos semanas previas al Año Nuevo Lunar, en comparación con el mismo período hace dos años. Los viajes durante el período de vacaciones del año pasado, durante las primeras etapas del brote de coronavirus, también se vieron interrumpidos.
Un índice de viajes publicado por Baidu Inc basado en datos de GPS de sus usuarios mostró una caída del 41% en los viajeros en comparación con 2019.
Las reservas de vuelos para las dos semanas anteriores a las vacaciones se situaron en el 32,8% del período equivalente en 2019, mientras que los billetes emitidos durante el período de vacaciones fueron solo el 14,7% del nivel de 2019, según la firma de análisis de viajes ForwardKeys.
«Las perspectivas para los viajes durante el período del Año Nuevo chino son actualmente espantosas … Se puede ver claramente el impacto de las restricciones oficiales de viaje en el comportamiento de reserva de los consumidores», dijo Olivier Ponti, vicepresidente de información de ForwardKeys.
En enero, el gobierno de China instó a las personas a abandonar los planes de viaje tras los nuevos brotes de COVID-19, lo que llevó a los gobiernos locales a imponer estrictas medidas de cuarentena. Algunas áreas relajaron su postura en los últimos días, lo que provocó algunas reservas de última hora, particularmente para Sanya, un popular destino de vacaciones en el Mar de China Meridional.
Boom de consumo de Staycation
Las empresas de logística, los productores de energía y los proveedores de entretenimiento como restaurantes y cines se han estado preparando para un mayor número de personas que se han quedado en las principales ciudades.
Las ventas anticipadas de boletos de cine para el período de vacaciones se ubicaron en 1.463 mil millones de yuanes ($ 226.67 millones) al 11 de febrero, solo superando los 1.458 mil millones de yuanes registrados en 2019, según datos de Dengta, un rastreador de datos de taquilla administrado por Alibaba Pictures.
State Grid de China esperaba que la carga máxima en el este de China aumentaría alrededor del 18% durante el período de vacaciones de este año, en comparación con 2020, mientras que en el noroeste y suroeste de China aumentaría un 10%.
China Southern Power Grid estimó que la carga máxima en las regiones del sur aumentaría un 14% con respecto al año pasado, ya que se espera que algunas plantas industriales reanuden sus operaciones antes de lo normal en años.
