El Presidente de Chile, Sebastián Piñera no descartó un cambio constitucional, si es lo que se concluye en los diálogos que está impulsando el gobierno a través del Ministerio de Desarrollo Social.
Eso sí, dijo el mandatario, la prioridad actual del gobierno es «restablecer y resguardar el orden público, la seguridad de nuestros compatriotas, proteger sus bienes, terminar con el vandalismo y delincuencia desatada que hemos conocido».
Luego, indicó, «impulsar con urgencia y con mucha fuerza la nueva agenda social que recoge las principales demandas de nuestros compatriotas: mejorar las pensiones, bajar o congelar las tarifas de los servicios públicos, mejorar el ingreso de los trabajadores y muchas cosas más».
Como otra etapa está la realización de diálogos ciudadanos.
«Cuando tengamos la genuina y fiel expresión de los chilenos vamos a iniciar una segunda etapa. En esa segunda etapa yo no descarto ninguna medida y estoy abierto a considerarlas todas», explicó Piñera.
«No descarto ninguna solución, ninguna reforma estructural», insistió.
Por la suspensión de la organización de la APEC y la COP25, a lo que ya dijo durante la mañana, el mandatario agregó que está optando a las demandas de los chilenos por sobre ambos foros.
«Tengo claro que mi deber como Presidente, es poner por delante los intereses, las necesidades, las prioridades de mis compatriotas, y, por esa razón, al igual que un padre de familia cuando tiene que escoger un problema de su familia y otro, siempre tiene que optar por su familia, un buen Presidente, cuando tiene que optar entre las demandas de sus compatriotas y reuniones internacionales, tiene que optar por las demandas de las chilenos», acotó.
Señaló también que ha sostenido conversaciones con varios líderes mundiales para tratar el tema, como Justin Trudeau de Canadá, o Donald Trump de Estados Unidos, y que su decisión ha tenido buena recepción entre ellos.
«Afortunadamente hemos tenido una tremenda comprensión de los países que iban a concurrir, a participar», dijo.
