La Organización de Estados Americanos (OEA) debería evitar posiciones “extremas” al enfrentar crisis regionales como el colapso social y económico de Venezuela y, en su lugar, promover el diálogo, dijo el martes un candidato a dirigir el organismo.
Hugo de Zela, un diplomático peruano y embajador de su país en Estados Unidos, se postula para desbancar al secretario general de la organización, Luis Almagro, que busca un segundo mandato de cinco años. El periodo actual de Almagro termina en mayo.
La OEA debe presionar para que los problemas se resuelvan dentro de sus países miembros al facilitar el diálogo entre diferentes facciones, sostuvo de Zela al margen de una reunión diplomática en Bogotá.
“Si la organización se coloca en uno de los extremos, deja de ser eficaz para resolver problemas, deja de estar presente en la solución y se convierte en parte del problema”, explicó de Zela. “Eso no puede suceder”.
La crisis económica y política de Venezuela, con una escasez generalizada de alimentos y medicinas, además de un éxodo de personas, ha dominado las recientes reuniones de la OEA, con algunos estados miembros que denuncian al presidente Nicolás Maduro como dictador, mientras que otros lo respaldan.
Los estados miembros también han discutido sobre la admisión a las reuniones de un representante enviado por el líder de la oposición de Venezuela, Juan Guaidó, quien argumenta que la reelección de Maduro en 2018 fue ilegítima. Guaidó invocó la constitución en enero para proclamarse presidente interino.
Almagro, un uruguayo cuya candidatura a la reelección está respaldada por Estados Unidos, Colombia y Brasil, ha tratado de aumentar la presión sobre Maduro, incluida la negativa a descartar el uso de la fuerza contra su gobierno el año pasado.
“Es evidente que en Venezuela hay una interrupción del proceso democrático, es evidente que el régimen de Maduro carece de legitimidad, eso no está en discusión. Pero al mismo tiempo, promover activamente el uso de la fuerza para resolver el caso de Venezuela es irreal y no ayuda”, afirmó de Zela.
“Eso nos está poniendo en un extremo. Hablar constantemente sobre el uso de la fuerza para resolver el problema de Venezuela no es una contribución efectiva o una contribución realista”, agregó.
Los venezolanos deben resolver sus propios problemas a través del diálogo, sostuvo de Zela, al reconocer que se deben celebrar elecciones libres y justas con urgencia en el país productor de petróleo.
“La OEA no está teniendo, como solía tener, un papel activo en la cooperación para resolver estas cosas”, afirmó de Zela. “Hay una falta de diálogo entre los países miembros y la secretaría general”.
