En acción articulada de las secretarías de Medio Ambiente, Espacio Público y la Subsecretaría de Seguridad Ciudadana y la Policía; se dio inicio a una serie de operativos de control de ruido en establecimientos comerciales del Distrito, los cuales tienen como objetivo garantizar el cumplimiento de la normativa vigente en materia de contaminación auditiva, y promover un ambiente más saludable y tranquilo para la comunidad.
Estos controles fueron solicitados por la misma comunidad afectada que reside en zonas aledañas a los locales que están generando ruido excesivo por las actividades económicas que realizan tanto en el día como en horario nocturno. Por ello, se realizó visita a establecimientos comerciales que ya estaban focalizados como emisores de niveles de ruido significativo, incluyendo fruvers en zona comercial y nororiental, bares, tiendas y locales dedicados a la venta de bebidas embriagantes.

Las inspecciones realizadas el 7 de junio se concentraron en los barrios Palmira, La Floresta y la Avenida 52.
“Necesariamente tenemos que llegar a un acuerdo para que la gente que está durmiendo pueda hacerlo y la gente que se está divirtiendo, pueda seguir haciéndolo. Los parlantes no deben estar ubicados en la parte externa de los establecimientos, deben estar ubicados al interior del mismo local y es sólo querer que el vecino de verdad pueda tener un sueño apacible en las noches”, fue lo expresado por Orlando Serrano Díaz, profesional de la Secretaría de Medio Ambiente.
Dicho esto, los beneficios que brindan estos controles son: • Reducir la contaminación acústica en las zonas comerciales. • Proteger la salud y el bienestar de los ciudadanos. • Sensibilizar a los propietarios de establecimientos sobre la importancia del control del ruido. • Fomentar el cumplimiento de la normativa vigente para asegurar un ambiente armonioso y saludable. • Propiciar el adecuado uso del espacio público.

Paralelamente a los operativos de control de presión sonora, junto a la Secretaría de Espacio Público y Control Urbano se realizó sensibilización sobre el uso adecuado del espacio público con el fin de garantizar la movilidad de peatones y vehículos.
Por su parte, la Policía en compañía del Ejército y personal de la Subsecretaría de Seguridad y Convivencia Ciudadana, efectuaron requisas y verificación de documentación a personas y establecimientos.
“Hemos encontrado muchos establecimientos de comercio que están excediendo los niveles de ruido permitido, necesitamos que nuestros amigos comerciantes también nos ayuden, eso también es orden público; si nosotros no entendemos que tenemos una sola ciudad para cohabitarla entre todos, va a ser difícil que consigamos esa Barrancabermeja que todos soñamos” fue lo manifestado por Eduardo Ramírez, subsecretario de Seguridad Ciudadana.

Es así como desde la Secretaría de Medio Ambiente, la Subsecretaría de Seguridad y la Policía, se hizo un llamado a todos los propietarios de establecimientos comerciales y a la ciudadanía en general para que colaboren en este esfuerzo conjunto. Es vital comprender que el control de los altos niveles de presión sonora no solo es una obligación legal, sino también una responsabilidad social que contribuye a mejorar la sana convivencia y por el contrario, reincidir en el uso excesivo de ruido, incurriría en acciones sancionatorias.
Por el momento estas jornadas serán netamente pedagógicas y se seguirán ejecutando en puntos estratégicos en los que la misma comunidad reporte la problemática. ¡Hay que trabajar por una Barrancabermeja segura y sin contaminación auditiva!