La escuela de idiomas American School Way realizó una encuesta a 10.000 estudiantes en Bogotá, Soacha, Medellín, Cali, Villavicencio, Manizales, Armenia, Pereira y Mosquera, que demostró que el nivel de inglés de estas personas empeoró durante la pandemia al menos 60%.
Entre los datos derivados del estudio, también se conoció que 85% de los encuestados prefiere aprender inglés de forma presencial sobre la virtualidad y el modelo híbrido.
“Cuando volvimos a las clases presenciales notamos que el nivel de inglés de nuestros estudiantes bajó de 387 a 232,2 puntos”, afirmó Claudia Martínez, directora de Calidad Estudiantil de American School Way.
Dijo que esos resultados se dieron, “a pesar de que durante este período muchos de ellos continuaron aprendiendo de forma virtual, por lo que implementamos diferentes acciones como maratones de inglés y clubs de conversación que hoy siguen vigentes para retomar y superar los niveles prepandemia”.
¿La virtualidad afecta la calidad?
De acuerdo con el estudio más reciente de EF Education First, el nivel de dominio de inglés en Colombia es bajo; sin embargo, para los expertos de American School Way una de las acciones clave para mejorarlo es que el aprendizaje del idioma sea de forma presencial.
Se encontró que, durante la virtualidad, las posibilidades para distraerse en los lugares donde toman las clases son de 54%, la falta de interacción entre pares y profesores asciende a 23%, los problemas de conectividad representan cerca del 15%, y otros factores suman 8%.
Los estudiantes indicaron que, entre las razones para preferir la presencialidad, se destaca la interacción en grupo y con los docentes, la retroalimentación y los procesos de enseñanza guiadas y personalizadas.
La señora Martínez se refirió a otras ventajas técnicas de aprender este idioma de forma presencial, señalando que la pronunciación de las vocales y consonantes de una lengua, es decir la fonética, se aprende de forma más fácil cuando se permite identificar gestos que la acompañan para pronunciar de forma correcta.
A su vez, aludió a la importancia de la participación, el intercambio de experiencias y el mayor grado de compromiso que se adquiere cuando se reciben clases de forma presencial.
“Sin duda la pandemia trajo grandes cambios a nivel educativo que demostraron la importancia de la virtualidad. Sin embargo, también demostró que los seres humanos necesitamos del contacto físico que solo se da con la presencialidad como aspecto fundamental al aprender un idioma”, puntualizó la directora.
“Es necesario aprender bien el inglés”
No obstante, del modo que fuese, Colombia requiere mejorar el dominio de este segundo idioma. Con el propósito de medir las habilidades de esta lengua en Colombia y otros países, EF Education First presentó la última versión de su “EF English Proficiency Index (EPI), en la que, a nivel de Latinoamérica, la nación ocupó el lugar número 17 de un total de 20 territorios, manteniendo la misma posición dentro de la región con respecto al año pasado.
Según el ranking global elaborado por la academia EF, el país perdió cuatro posiciones al pasar del puesto 77 en 2020 al lugar 81, en 2021, entre un total de 112 regiones.
Esto demuestra que no ha habido un avance significativo y que por el contrario va en detrimento con el tiempo. De acuerdo con los resultados de esta medición, el dominio del inglés en el país continúa en un nivel bajo pese a su importancia en indicadores económicos como el PIB y la renta per cápita. Pues según EF, este idioma se ha convertido en una habilidad fundamental para formar una fuerza de trabajo moderna que permite la exportación de servicios, mejora de la competitividad, y facilita el comercio internacional.
Por esta razón, es fundamental mejorar el nivel desde las instituciones educativas públicas y privadas, pues es innegable la destreza tan esencial en la que se ha convertido este idioma para la economía. Ha sido tanta su relevancia y potencialidad que, a partir de 2025, la Ocde lo añadirá a su Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (PISA) junto con la lectura, las matemáticas y las ciencias.
