Por: Jesús Heraldo Rueda Suárez/ Si miramos la historia, nos daremos cuenta que la religión ha experimentado muchas variaciones, nace como una necesidad ancestral, surge el nacimiento de las religiones monoteístas, en las que se adora a un único Dios, dioses que también han cambiado a lo largo de los siglos y han adoptado distintos nombres y formas.
La religión también ha llegado a institucionalizarse y en su nombre se han creado instituciones sociales con el propósito de prestar o mejorar servicios, como la educación y la salud.
La parte negativa es que también han sucedido grandes guerras bajo su nombre y se han cometido gran cantidad de crímenes e injusticias en base a dictámenes de fe, también la han convertido en negocio donde se han edificado fortunas sobre la FE.
Por otra parte, están los efectos negativos de la religión e idolatría según mi opinión y me surgen estas preguntas: ¿Qué pasa por la cabeza de quienes cometen masacres? ¿Qué caracteriza a una persona fanática? fanatismo que se usa para cometer barbaries, para beneficio de quien lo practica y para distorsionar el verdadero sentido de la fe.
La fe fanática no solo mueve montañas; también mueve armas, ejércitos, promueve el odio, justifica actos indebidos escudándose en Dios, y encuentra en otro mundo las razones para desdeñar la vida humana, el resultado es escalofriante: el supuesto mandato divino es una de las principales causas de muerte en el planeta.
“El fanatismo es a la superstición lo que el delirio es a la fiebre, lo que la rabia es a la cólera, El que tiene éxtasis, visiones, el que toma los sueños por realidades y sus imaginaciones por profecías es un fanático novicio de grandes esperanzas; podrá pronto llegar a matar por el amor de Dios” (Voltaire).
La fe es abierta y fraterna, el fanatismo es cerrado y egocéntrico, la fe es respetuosa, el fanatismo es intolerante, la fe es constructiva, el fanatismo es destructivo, la fe predica la paz, el fanatismo acepta la violencia, la fe es amorosa, el fanatismo implica odio hacia lo diverso, la fe no se grita, no se vive hablando de ella o usándola para intereses personales, el fanatismo es narcisista se grita para impulsar “el yo si soy”.
El sufijo “ismo” hace referencia a una doctrina, a una creencia en particular, por otra parte, el término “fan” hace alusión a un seguidor entusiasta de una persona o cosa en particular, el fanatismo es una miopía espiritual, porque se confunde la propia percepción de la realidad con una verdad universal que debe ser aceptada por todos.
El fanatismo, rompe las barreras de la racionalidad donde el sujeto se cree dueño de una verdad absoluta y atemporal, de la cual no se puede hacer la más mínima crítica o reflexión, bajo su influencia se han justificado conflictos bélicos, despojo forzoso de territorios ancestrales, genocidios, asesinatos y actos terroristas.
En la Historia humana se han vivido constantes movimientos fundamentalistas e intolerantes por parte de diversas religiones, el fanático religioso realiza una tergiversación de los principios y enseñanzas de la religión a la cual dice pertenecer, para su beneficio.
La mencionada ceguera que produce el apasionamiento lleva a que el fanático se comporte, en ocasiones, de manera violenta e irracional, el fanático está convencido de que su idea es la mejor y la única válida, por lo que menosprecia las opiniones de los demás.
Pasan por mi mente la cantidad de masacres, limpiezas étnicas y asesinatos abominables que se han sucedido a lo largo de la historia en nombre de un Dios, de una creencia o idea, de un líder, incluso en Colombia en la época álgida de la guerra con los carteles los sicarios tenían su virgen y antes de cometer un acto de sicariato se persignaban y oraban para que les fuera bien.
Si bien es entendible que asi como las personas debemos defendernos de ofensas y ataques, mas aun que lo hagan los países, y tengan su presupuesto en defensa, lo inconcebible es ver como se gastan miles y miles de millones de dólares en guerras que producen: hambre, miseria, destrucción, muerte, sufrimiento, y muchos mas efectos colaterales y no usar ese mismo dinero, en construir naciones, pueblos prosperos, con educación, con salud, con trabajo y calidad de vida, en paz, incluso gastarían menos dinero en esa inversión.
Lo más curioso es que es el fanatismo religioso es el que más sangre ha llegado a derramar en nombre de una deidad, algo que es contradictorio con los ideales de las propias religiones que se esgrimen para hacer daño, como ejemplo podríamos nombrar a la Santa Inquisición, esa institución que se encargaba de aniquilar a todo aquel que supuestamente estuviera en contra de sus ideas.
Recuerdan los atentados terroristas ocurridos en Francia,noviembre 13 de 2.015, o el caso de Anders Breivik, quien en 2011 asesinó a 77 personas en un atentado con coche bomba en Oslo y posteriormente perpetró una masacre con armas largas en la isla de Utoya, donde se encontraban las juventudes de los social demócratas noruegos, él era un ultra católico que escribió un manifiesto de 1.500 páginas antes de cometer los asesinatos defendiendo la expulsión de los musulmanes de Europa, el holocausto nazi, lo que está ocurriendo en Israel, lo vejámenes contra las mujeres en Afganistán, Iran y muchos más para no extenderme.
Y me surge esta pregunta: así como cuando uno se pregunta… ¿qué puede haber en las mentes de esas personas que son capaces de asesinar brutalmente a otras que no piensan como ellos?; cuando, en último término, las personas somos independientes y tenemos derecho a pensar o creer en lo que queramos, siendo esto algo que nadie nos puede arrebatar.
Si una persona está segura de sí misma, para empezar, es capaz de tolerar con flexibilidad que existan opiniones diferentes a la suya y mantener una actitud abierta a nuevas ideas o matices, algo que los fanáticos son incapaces de hacer, pues esto significaría contemplar que pueda existir una realidad distinta a la que ellos creen y esto les produce temor, no solo no toleran ideas distintas a las suyas, si no que persiguen y condenan a aquellos que les contradicen, pues estos podrían provocar que su seguridad y estabilidad tambalearan.
El fanatismo en casi todas sus manifestaciones nos hace menos equilibrados, medidos y racionales, debería ser de interés de la sociedad combatirlo, a través de la educación, ya que el fanatismo tiene una conexión directa con la ignorancia, solo la educación de calidad nos hace más tolerantes, nos permite oír lo que otros tienen para decir, nos abre a nuevos argumentos y modos de ver el mundo, nos habilita a pensar críticamente, a la vez que nos hace reflexionar sobre nuestros propios hábitos de pensamiento.
Hasta aquí, podríamos decir que hemos conseguido, más o menos, ponernos en los zapatos de los fanáticos y entender, cómo piensan y qué sienten para actuar así, tras este análisis solo queda en mí un sentimiento de lástima, si lástima de que alguien pierda su libertad, de que viva en su única realidad, de que no sean capaces de aceptar la incertidumbre y de que lleguen a morir o asesinar por perseguir un ideal considerado más importante que la propia vida.
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*Profesional en Mercadeo
Dios no es religión Dios es relación 🙏🙏🙏 Gracias excelente artículo. Dios te Bendiga 🙏🙏🙏