Los besos son una causa de afecto que normalmente desarrolla el ser humano, ya sea por cordialidad o simplemente por la confianza que se ha brindado a otra persona.
Sin embargo, muchos individuos en el mundo que suelen tener este gesto, normalmente, no lo tienden hacer en los labios.
No obstante, William Jankowiak, profesor de antropología de la Universidad de Nevada Las Vegas, realizó un estudio, en el que fueron analizados 168 culturas, para determinar las causas del porqué los seres humanos tendemos a dar besos, si otras especias cercanas como los monos no lo hacen, y simplemente demuestran su cariño de otras maneras.
En su análisis, el profesor pudo concluir que solo 46% de la población se besa en la boca como un gesto romántico, haciendo una excepción en los padres con sus hijos; ya que lo hacen de forma amorosa, o de las personas que saludan en la mejilla por simple cordialidad.
«Considero que la clave de la universalidad humana de naturalizar los besos o la ausencia de ella, es debido a la sensualidad de las personas, aunque se puede expresar de otras formas que van más allá de un simple beso», resaltó Jankowiak.
Ahora bien, este experto también determinó que esto se puede deber a la forma natural en la que nacemos, ya que el contacto frecuente del bebé con el seno de su madre, hace que de una forma u otra se vuelva un gusto el sentir algo en los labios que en este caso puede ser el contacto con otro ser humano.
Por otra parte, también señala que los labios son una de las partes más sensibles del cuerpo, y a su vez lo más visto, algo que puede causar el deseo para que otra persona pueda generar un beso, incluyendo que algunas personas, especialmente las mujeres, tienden aumentar el tamaño de los mismos, para lucir un poco más atractivas.