Todos los hombres en Colombia, salvo algunas excepciones, están obligados a prestar servicio militar. Para las mujeres, es voluntario. Esta diferenciación, a juicio de una demanda que estudia la Corte Constitucional, podría estar violando el derecho a la igualdad. En ese sentido, pide que se declare que el servicio para todos, hombres y mujeres, sea voluntario. Hasta ahora, todas las instituciones han pedido que se mantenga en firme la norma, incluido el Ministerio de Defensa.
Según describe la Corte, el demandante considera que “el hombre y la mujer deben recibir el mismo trato, en lo referente a la obligación de prestar el servicio militar, porque la propia Constitución excluye las discriminaciones y prohíbe la parcialidad en la aplicación de las normas”. Así las cosas, desde marzo de 2022 el despacho del magistrado Alejandro Linares aceptó estudiar la demanda y ha pedido algunas pruebas al Ministerio de Defensa.
La entidad contestó en junio de este año, siendo todavía presidente Iván Duque y ministro Diego Molano. En un documento de 32 páginas, la entidad se opuso a volver voluntario el servicio militar. Además de considerar que ya hay cosa juzgada, sus argumentos se centran en cifras: sin soldados que entren a las fuerzas por la vía obligatoria, Colombia no tendría cómo velar por el orden público en tierra, mar, aire, en zonas urbanas y rurales. Esas funciones que hoy cumplen militares rasos, las tendrían que cumplir otros que hoy tienen mayor rango, lo que aumentaría los costos.
En palabras del Ministerio: “Eliminar el servicio militar, implicaría que todas las funciones que prestan los soldados conscriptos deberían ser asumidas por el personal de oficiales, suboficiales, soldados profesionales, infantes de marina, patrulleros. Todo ese personal se restaría a las funciones de vigilancia y operaciones militares en el territorio nacional. Sumado a ello, para cubrir las necesidades del servicio se debería incorporar personal, lo que crearla la necesidad de un mayor presupuesto”.
El Observatorio de Justicia Constitucional de la Universidad Externado le contestó a la Corte con una dura aseveración: “La exclusión de las mujeres del servicio militar obligatorio es una reliquia histórica que debe ser eliminada en aras de la igualdad de género”. El profesor Markus Meier explicó en este concepto que no hay razones objetivas para afirmar que las mujeres sean menos aptas para prestar servicio militar y que su exclusión se ha fundamentado, en pocas palabras, en una falsa medida de igualdad.
La última en hacer llegar su opinión sobre este espinoso tema fue la Procuraduría. Y uno de sus argumentos centrales para pedir que se mantenga en firme la norma es, precisamente, la medida de igualdad que criticó el académico del Externado. Según esa visión, la exclusión de las mujeres del servicio militar obligatorio “tiene como fin responder a la especial situación de violencia que padecen en el marco del conflicto armado debido a la existencia de estereotipos de género”. Así, supuestamente, si las mujeres no van a la guerra, pueden, por ejemplo, concentrarse en sus estudios, asegura el concepto que firmó la procuradora Margarita Cabello.
Con su concepto se cierra la práctica de pruebas del caso en el despacho de Linares, que deberá presentar un proyecto de sentencia para presentarles a sus colegas de la Corte Constitucional. Si bien Gustavo Petro ha hablado en favor de modificar el servicio militar obligatorio, a la fecha su gobierno no ha presentado una opinión sobre este tema ante el alto tribunal. Tiene el tiempo en contra, pues los términos ya están corriendo y la decisión podría llegar en las próximas semanas.
