El presidente Gustavo Petro se reunió este jueves seis con John McNamara, encargado de negocios y embajador interino de Estados Unidos en Colombia, para discutir dos temas clave en la relación bilateral: la protección de los colombianos deportados y las estrategias conjuntas contra el narcotráfico.
«Recibí a John McNamara. Hablamos mucho de Bolívar, de ‘Cien años de soledad’, de las fuerzas especiales de EE. UU. y de la dignidad de los migrantes», escribió Petro en su cuenta de X tras el encuentro, destacando el tono cordial de la reunión.
La canciller de Colombia, Laura Sarabia Torres, enfatizó que el Gobierno garantizará el respeto a los derechos de los colombianos retornados desde EE. UU. “Tenemos una instrucción clara: vamos a recibir a todos los connacionales y no los dejaremos solos», afirmó. Además, subrayó que “mantendremos un trato digno, velando siempre por la protección de sus derechos».
El otro eje central de la conversación fue la lucha contra el narcotráfico. Sarabia explicó que “no se trata solo de combatir el problema con la Fuerza Pública, sino de instaurar estrategias conjuntas que permitan la sustitución de economías ilegales».
En esa línea, señaló que el objetivo es “garantizar que nuestros campesinos tengan proyectos productivos que sean sostenibles y competitivos en el tiempo».
El presidente Petro resaltó el buen ambiente del encuentro y reveló detalles del intercambio con McNamara. “Le regalé una balsa muisca, café colombiano y un sombrero Zenú cordobés. Le mostré –y se emocionó mucho porque es católico– la sotana del sacerdote que se marchó a la guerrilla del Eln: Camilo Torres Restrepo, fundador de la Facultad de Sociología de la Universidad Nacional», contó el mandatario.
Finalmente, la canciller subrayó la importancia del diálogo para la relación bilateral: “A pesar de cualquier tensión o diferencia, la diplomacia será siempre el camino para fortalecer la agenda entre ambas naciones».
- (Con información de Cancillería)
