Por: Laura Juliana Ruiz/ Quiero comenzar mi escrito agradeciendo a usted que pertenece al exclusivo 26% de personas que leen por gusto en nuestro país. Sin muchas pretensiones o expectativas, quiero introducirlo a este escrito “light”, con toques de verdad y el sarcasmo que me caracteriza.
Como si se tratase de una premisa mayor, “el todo vale” se nos ha forjado en el tuétano desde que estábamos mudando de dientes, sin embargo, en mi opinión, es una interpretación errónea. Hemos perdido las formas con tal de conseguir ese único objetivo que mueve al mundo, el dinero, aunque para muchos, fácil, como si se tratase de un talento innato, como un Rey Midas que todo lo que tocaba lo convertía en oro, o simplemente aprovechando el cuarto de hora – barbacha.
Sin embargo, para otros conseguirlo no ha sido nada fácil, parece que el dinero es privilegio de pocos, 70 mil millones no son oportunidades para todos ¡qué va! si al fin y al cabo uno no extraña lo que no conoce, así que mejor evitemos el calentamiento global, el consumo de energía, la información junk en internet y dejemos que la juventud crezca fundamentada en los valores de la ruralidad colombiana sin conectividad el futuro es de todos y no pasa nada…
Y ¿por qué no? El “Inge help me” nada tiene de malo que un ingeniero ayude con dulces, me pregunto si eran los mismos que el Burgués con tanta mezquindad repartió a los niños en Chocó, o el apunte de impopulares pero eficientes, diciendo que las sintéticas son calidad de vida para la comunidad NARP o tuchis con el apunte de los pobres son pobres porque no ahorran. Dinero y más dinero… pareciera que todo gira en torno a él.
Unos abudineando, otros ambuliando y otros trabajando por un salario mínimo de “un millón” sí, como lo escucha, usted es millonario, gracias al miembro de la nobleza de categoría inferior a la de príncipe y superior a la de marqués. Esto no refleja mas que nuestro peso está en los sótanos del infierno, a donde también ira parar directamente el des-Leal Jhonier quien es un vivo ejemplo del todo vale.
No todo vale, la vida vale, el hacer las cosas bien vale, aunque muchas veces pareciera que no, pero el hecho de no tener un asesino, un corrupto, un inimputable en su casa, en su familia, es mucho honor, ¡mano¡ dígame quién no se emberraca con esta justicia, donde un tipo un día está cargando una maleta por la carrera 22 en Bucaramanga o tirando una bolsa negra junto a una quebrada en Girón y al otro sale a llorar a decir “no lo vuelvo a hacer”.
Los buenos somos más y no venere ni se le arrodille a esos tipos que por estos días se engoman el pelo, visten de camisa blanca, con caballo bordado y levitan entre la multitud, que si no fuese por el tapabocas mostrarían su sonrisa de piano tan falsa como ellos. Usted que todos los días trabaja, tiene dificultades y a pesar de ello se levanta y continua, usted sí merece respeto, no, los “todo vale”.
…
*Abogada, especialista en enfoques diferenciales, máster en Análisis Económico del Derecho y las Políticas Públicas. Demócrata, defensora de DDHH, orgullosamente santandereana.
Facebook: Laura Juliana Ruiz B
Twitter: laujuliruiz2