Sin embargo, se mantienen las operaciones en Hatay y Kahramanmaraş, dos de las más afectadas. Más de 46.000 muertes han sido confirmadas hasta el momento en Turquía y Siria y se espera que la cifra aumente debido a que miles siguen desaparecidos.
Recta final de las operaciones de rescate en Turquía. Las esperanzas de encontrar más sobrevivientes eclipsan luego de que este domingo 19 de febrero concluyeran las labores de búsqueda de posibles sobrevivientes en la mayoría de las provincias afectadas por el terremoto del pasado 6 de febrero.
Solo se mantienen los operativos en Hatay y Kahramanmaraş, dos de las zonas más afectadas en el sur del territorio turco.
Si bien los expertos señalan que la mayoría de hallazgos exitosos tienen lugar en las primeras 24 horas de un desastre, este país ha presenciado milagrosos rescates en los últimos días, en los que han sacado a varias personas con vida tras permanecer hasta 12 días bajo las ruinas.
Los más recientes fueron informados el sábado 18 de febrero, cuando los equipos de emergencia encontraron a tres personas, incluido un niño. Aunque la madre y el padre sobrevivieron, el pequeño murió más tarde por deshidratación.
Ahora, las posibilidades de hallar vida de entre los escombros se reducen aún más. “En muchas de nuestras provincias se han completado las labores de búsqueda y rescate. Continúan en las provincias de Kahramanmaraş y Hatay”, ratificó en Ankara el jefe de la agencia de desastres turca, Yunus Sezer.
En concreto, los esfuerzos por localizar posibles sobrevivientes continúan en unos 40 edificios de las mencionadas provincias.
La cifra de muertes supera la barrera de los 46.000
Dos semanas después del peor suceso en la región, como describe la ONU, las autoridades confirman más de 46.000 víctimas mortales por el movimiento telúrico y las réplicas que sacudieron tanto el sur de Turquía como el noroeste de Siria. La mayoría de decesos se registran en suelo turco.
Pero se espera que el número de fallecidos se dispare debido a los miles de personas continúan desaparecidos.
Solo en Turquía, alrededor de 345.000 apartamentos quedaron destruidos, según cifras oficiales.
EE.UU. anuncia cien millones de dólares más en ayuda
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, llegó este domingo a Turquía para impulsar la ayuda de Washington a la región azotada por el devastador sismo de 7,6 grados de magnitud.
Blinken, que sobrevoló una de las zonas más afectadas junto al ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, anunció cien millones de dólares adicionales para responder a las consecuencias de la devastación en los dos países.
Se eleva así a 185 millones de dólares el monto total hasta ahora confirmado por Washington para hacer frente a la catástrofe.
«Estoy profundamente entristecido al ver de primera mano la devastación de los terremotos en Turquía. Estados Unidos sigue comprometido a hacer todo lo que podamos para ayudar con los esfuerzos de rescate, ayuda y recuperación», publicó Blinken a través de su cuenta de Twitter, tras sobrevolar algunas de las áreas más golpeadas, en la provincia de Hatay.
Esta es la primera visita del máximo representante de la diplomacia estadounidense a suelo turco desde que asumió el cargo y está previsto que participe en un acto oficial en Ankara el lunes 20 de febrero.
Urgen a grupos sirios a desbloquear el acceso
Los habitantes de Siria, una nación ya azotada por la guerra de más de una década, han visto obstáculos para acceder a la ayuda humanitaria.
Con temperaturas bajo cero y en la intemperie o campamentos improvisados permanecen miles de familias que quedaron sin hogar, mientras urgen a la entrega de alimentos, agua, mantas y otros artículos de primera necesidad.
Aunque varias organizaciones de derechos humanos informan sobre sus esfuerzos para llevar asistencia a los afectados, la entrega se ralentiza. Y es que en medio del conflicto interno, la nación está parcialmente dominada por el régimen de Bashar Al-Assad y otras zonas por grupos de oposición como la organización yihadista Hayat Tahrir al-Sham.
Ante este panorama, el jefe del Programa Mundial de Alimentos (PMA) presionó este fin de semana a los grupos que controlan el noroeste del país para que dejen de bloquear el acceso a la zona, con el fin de llevar la ayuda a cientos de miles de personas devastadas por la tragedia.
No obstante, la organización Médicos Sin Fronteras (MSF) informó que un convoy de 14 camiones con asistencia logró ingresar al noroeste del territorio este 19 de febrero, desde un cruce fronterizo cercano para ayudar en las operaciones de rescate.