Durante un emotivo encuentro con los mamos de la Sierra Nevada de Santa Marta, que se cumplió este viernes en la localidad de San Miguel, el Presidente Juan Manuel Santos dialogó con estos líderes de las comunidades arhuaco, kogui, wiwa y kankuamo, les agradeció por su apoyo durante los ocho años de gobierno y les devolvió el bastón de mando que ellos le habían prestado en agosto de 2010, el día de su posesión, pero, para su sorpresa, los mamos le pidieron que se quedara con él, en reconocimiento y gratitud por sus esfuerzos en favor de la paz y del cuidado del medio ambiente.
Acto seguido, el Mandatario recordó ese momento vivido hace ya casi ocho años, y el contraste del encuentro de este viernes que tuvo un significado nostálgico de agradecimiento y despedida: “Como Presidente vine aquí el día de mi posesión, el 7 de agosto del año 2010, y vine en cierta forma a pedirles permiso a nuestros hermanos mayores para asumir el mando, para posesionarme ante el Congreso de la República, y tuve una larga conversación con ellos y ellos me dieron su visto bueno, su respaldo y me entregaron este bastón y me dijeron: Le entregamos este bastón y una serie de materiales que nunca se acaban, para que los mantenga durante su mandato, pero cuando vaya a terminar su mandato tiene que venir aquí y devolvernos el bastón y estos materiales”.
“A eso he venido, a devolver el bastón, a decirles que eso que me dijeron hace ocho años, sobre todo dos puntos específicos: cuide, Presidente, me dijeron, la madre naturaleza; cuide el medio ambiente, porque el medio ambiente es la fuente de nuestra vida. Si no cuida el agua, si no cuida todo lo que representa la naturaleza, simple y llanamente dejamos de existir”, relató el Jefe de Estado. Y agregó: “Ocho años más tarde, vengo a decirles a los mamos: aquí está el bastón; la paz se logró con las Farc y estamos en este momento avanzando con el ELN”.
De acuerdo con el relato del Mandatario, durante su diálogo, ellos, los mamos de la Sierra Nevada, entendieron muy bien que este logro de la paz es un primer paso, porque lo que viene es la verdadera construcción de la paz, que, según el Presidente, “está en nosotros mismos, en el respeto por las diferencias, en el respeto por las diferentes culturas, en el respeto por las comunidades indígenas, por esa variedad que somos los colombianos, que en el fondo nos da una tremenda fortaleza”.
De modo que en cuanto a este primer compromiso con los mamos indígenas, el Presidente Santos no escatimó esfuerzo alguno para cumplirlo. En cuanto al segundo, el trabajo por el cuidado de la madre naturaleza, el balance de su gobierno también es muy positivo, se avanzó mucho, aunque reconoció que queda camino por recorrer.
De este modo, el Mandatario pudo contarles a los mamos que durante su gobierno el país pasó de 13 millones y medio de hectáreas protegidas a 43 millones, que se dejarán delimitados los 37 páramos del país, que 13 humedales pasaron a la lista internacional Ramsar, que se estableció la protección especial para 8,5 millones de héctareas de reserva forestal en la Amazonia, y que Colombia lideró los temas ambientales en el escenario mundial, entre otro logros.
Ley de Cambio Climático
Tras su encuentro con los mamos, el Presidente Santos procedió a sancionar dos leyes de importancia histórica para el país.
La primera es la Ley de Cambio Climático, que crea las condiciones y ofrece las directrices necesarias para gestionar la adaptación del territorio nacional a los efectos de este fenómeno, y para mitigar la emisión de gases de efecto invernadero.
De hecho, esta ley contribuirá al cumplimiento del compromiso adquirido por el país frente al Acuerdo de París para reducir el 20 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera, proyectadas al año 2030, y avanzar en una senda de desarrollo resiliente al clima.
El objetivo de la reglamentación es también reducir la vulnerabilidad de la población y de los ecosistemas del país frente a los efectos del cambio climático y promover la transición hacia una economía competitiva y sustentable.
Así mismo, contempla el reconocimiento del Sistema de Información Nacional sobre Cambio Climático como uno de los elementos fundamentales para la toma de decisiones, y prevé la creación de instrumentos económicos y financieros para la gestión del cambio climático.
Esta ley es el punto más estratégico en la gestión de la adaptación del país al fenómeno, y se une a otros avances, como las 43 medidas y líneas de acción que han sido definidas para lograr la meta nacional de reducción de emisiones de gases efecto invernadero.
Ley de Páramos
La segunda norma sancionada en la Sierra Nevada por el Mandatario es la Ley de Páramos, orientada a construir las bases de una política pública en materia de conservación de los ecosistemas de páramo, entendiendo la integralidad de éstos y su importancia por los servicios ecosistémicos que prestan.
Esta ley se convierte en una herramienta útil para avanzar en la protección de los páramos y acude a un enfoque socio-ecosistémico e integral que contempla tanto la información técnica de la definición y delimitación de estos ecosistemas, como la inclusión y participación de las comunidades paramunas.
La ley también posibilita una mayor disponibilidad de recursos para la gestión integral de los páramos, pues faculta al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible para buscar la cofinanciación de los proyectos, a través de la cooperación internacional y el Impuesto Nacional al Carbono.
Igualmente, promueve y facilita la construcción de mecanismos que buscan responder a la necesidad de generar alternativas productivas para los habitantes de los páramos, que permitan garantizar su permanencia en las áreas delimitadas mediante su vinculación a la conservación y sostenibilidad ambiental de estos ecosistemas, como una nueva economía basada en alternativas productivas sostenibles que sustituyan las actividades prohibidas en los páramos.
Así mismo, permite definir las condiciones para la delimitación, fuentes de financiación y mecanismos de monitoreo, evaluación, vigilancia y control, que serán desarrollados por los habitantes presentes en estos ecosistemas estratégicos, quienes tendrán la oportunidad de convertirse en gestores de páramos.
Se busca también que la construcción de los programas y proyectos relacionados con la sustitución y reconversión de las actividades prohibidas en los páramos, se realice con la participación activa de la comunidad paramuna, con criterios de enfoque diferencial, transitorio, progresivo y generacional.
Las fuentes de financiación serán, entre otros, los Pagos por Servicios Ambientales, las líneas especiales de crédito y la asistencia técnica y acompañamiento del sector de agrícola, como la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria (UPRA), la Agencia Nacional de Desarrollo Rural (ADR), la Agencia Nacional de Tierras (ANT) y las autoridades ambientales regionales.
Palabras de despedida
Al concluir el acto, el Presidente se despidió de los mamos de la Sierra Nevada de San Marta: “Yo les gradezco enormemente este recibimiento. Yo valoro muchísimo lo que ustedes han dicho, sé el significado de todas y cada una de sus palabras. Tengan la seguridad de que donde esté, con mi familia, los recordaremos, los defenderemos y lucharemos por esos ideales que ustedes también defienden, porque son los ideales más lógicos y más importantes que hoy tiene la humanidad: la paz y el medio ambiente”.