By using this site, you agree to the Privacy Policy and Terms of Use.
Aceptar
CorrillosRCorrillosRCorrillosR
  • Nacional
  • Capitales
  • Economía
  • Política
  • Informe
  • Análisis
  • Regional
  • Internacional
  • Descubrir
Lectura: VIH y jóvenes
Compartir
Notificación Mostrar Más
Aa
CorrillosRCorrillosR
Aa
  • Nacional
  • Capitales
  • Economía
  • Política
  • Informe
  • Análisis
  • Regional
  • Internacional
  • Descubrir
  • Nacional
  • Capitales
  • Economía
  • Política
  • Informe
  • Análisis
  • Regional
  • Internacional
  • Descubrir
Tiene una cuenta existente? Signo En
Suscribirse con NOSOTROS
  • Advertise
© 2022 Foxiz News Network. Ruby Design Company. All Rights Reserved.
CorrillosR > Blog > Opinión > VIH y jóvenes
Opinión

VIH y jóvenes

CORRILLOS
Última actualización: 2019/12/04 at 12:23 AM
CORRILLOS hace 6 años
Compartir
COMPARTIR

Por: Diego Ruiz Thorrens/ El pasado domingo primero de diciembre se conmemoró una nueva fecha del día internacional de la lucha contra el sida. Desde hace más de 30 años, millones de personas han levantado su voz frente la desidia política que condenó a muerte a otros tantos millones de seres humanos.

Luego, con la llegada de los antirretrovirales (medicamentos que mejoran la calidad de vida de todas aquellas personas viviendo con el virus), la lucha se trasladó al plano del acceso al tratamiento oportuno, borrando casi de la memoria colectiva aquello que antes significaba una sentencia inamovible de cambiar, incluso una meta imposible de lograr: detener, frenar por un tiempo el posible avance de un virus que, al no poder ser controlado, debilitaría el sistema inmune de su habitante, llevando a la persona lentamente a la muerte.

Repito: millones de personas han perecido en esta lucha, y la muerte, implacablemente, consiguió arrebatar la vida de niños, jóvenes, hombres y mujeres, sin ningún tipo de distinción.

Sí, el virus ha sido mayormente implacable con algunos tipos de poblaciones. Inicialmente, cuando atacó a la población de hombres homosexuales, lo hizo de una manera perversa, duramente. Desafortunadamente, el virus no sólo esparció su poder manifestándose en la muerte de miles de inocentes, sino que al mismo tiempo logró sacar el lado más inhumano y oscuro del alma del hombre.

Pensando que el VIH era un asunto exclusivo de homosexuales, la humanidad pronto descubrió que nadie, absolutamente nadie era vulnerable al virus. Las mujeres, especialmente mujeres con parejas estables, comenzaron a ser el nuevo rostro de un fantasma que dejaba claro que el mismo no se alimentaba de la vida de “homosexuales”. Todos, absolutamente todos, éramos vulnerables.

Algunas personas siguen sin comprender la dimensión que tienen los medicamentos que deben tomar los pacientes que viven con el virus (y ahora también todas aquellas personas que quieren evitar adquirir el virus del VIH): la llegada de los medicamentos antirretrovirales significó (y lo sigue siendo) una nueva oportunidad de vida, logrando dar un nuevo aliento a todas aquellas personas que descubrieron que el virus navegaba en sus cuerpos.

Sin embargo, los estigmas y la discriminación hacia todo aquello que representase el virus en realidad variaron muy pero muy poco. Ahora el problema no era solo de homosexuales: el problema se transformó en aquel dedo acusador que juzgaba a todos aquellos “portadores” y no portadores (odioso y nefasto término, puesto que nadie “porta” un virus, solo se vive con él) por tener sexo. La sexualidad se manifestó como el nuevo pecado, pecado que, si alguien decidía asumirlo, llegaría con “consecuencias” inevitables. El tabú se escabulló socialmente adquiriendo el rostro de la Muerte.

Y entonces, las campañas más brutales y continuas llegaron con la “prevención del virus”. Después de interminables debates, el preservativo llegaba como la única (real) herramienta posible de “bloquear” el virus, haciendo que un instinto tan natural como el sexo nuevamente alcanzare su dimensión humana, ahora acompañada de la “precaución”.

No obstante, tuvo que pasar nuevamente un tiempo considerable para que el uso adecuado del condón adquiriera una validez seria y real: el preservativo no era solo para que aquellos hombres que tenían sexo con otros hombres. El preservativo debería (y debe) ser para todo el mundo. Todos. Sin excepción. Incluyendo, por supuesto, a las mujeres.

Pero… hablar de sexo casi resultó igual que hablar de “mayoría de edad”. Es aquí donde la pregunta crucial que debimos hacernos desde muchísimos años adquirió nuevamente un valor supremo: ¿Y los jóvenes qué? ¿Por qué es tan pero tan difícil para los padres, parientes, docentes, tutores y acompañantes de todos los jóvenes hablar de sexo, prevención, y de infecciones de transmisión sexual y el VIH/Sida?

En los inicios de la historia del virus, miles de jóvenes homosexuales, muchos de ellos en su primera experiencia sexual, perecieron por amar a alguien de su mismo sexo. Quizá por ello, algo que no ha cambiado en la historia, es que, al hablar con niños, adolescentes o jóvenes gay, bisexuales o que tienen sexo con otros hombres siga siendo socialmente difícil, lo cual no debería serlo. 

Tampoco debería serlo cuando se habla con niños, adolescentes y jóvenes sexualmente activos, heterosexuales o no. Por ello considero que como papás, tíos, primos, parientes, amigos y como sociedad debemos dejar los tabúes de la sexualidad en otro lado… más cuando la incidencia (los nuevos casos) en VIH siguen creciendo, en Santander y en muchas regiones del país, y los jóvenes pueden verse afectados por este aumento.

Para los padres que piensan que la abstinencia es la mejor forma de evitar una infección de transmisión sexual les diré: ¿Saben qué? Tienen razón. Pero ésta no es ni de cerca la realidad que viven los jóvenes.

Les debemos la oportunidad de hablar de prevención, de sexo, de responsabilidad, de decisiones, de embarazos no deseados y de infecciones de transmisión sexual de manera abierta. Ojalá lo logremos hacer, así sea algún día. Ojalá pronto.

Twitter: @Diego10T

You Might Also Like

La doble cara del Gobernador

¿Es necesario ser o hacer oposición? Contar… sin decir

Colombia: la patria que canta en los funerales y mata por amor

Reflexión humana

Cuando la psicología cruza la frontera de la política

ETIQUETADO: Diego Ruiz Thorrens, Juventud, Sida, VIH
CORRILLOS diciembre 4, 2019 diciembre 4, 2019
Compartir Este Artículo
Facebook Twitter Whatsapp Whatsapp Email Print
Artículo Anterior Un desafío para la justicia: atrapar falsos “influencers”
Próximo Artículo Duque y Rodolfo: ojos vendados
Deja un comentario

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Corrillos edición 41

Síguenos

en nuestras redes socilaes
Facebook Like
Twitter Follow
Instagram Follow
Youtube Subscribe
Tiktok Follow

Noticias populares

Judicial

Capturada mujer que extorsionaría a un ciudadano con amenazas personales

CORRILLOS Por CORRILLOS hace 16 minutos
Asesinan a reconocido ganadero en zona rural de Nueva Granada
Banco de la República mantiene estable la tasa de interés en 9,25%
Presidente de la Cámara acata fallo de la Corte Constitucional y convoca a plenaria
EE.UU. y China firman nuevo acuerdo comercial para reactivar exportaciones y reducir tensiones

Las principales noticias de Colombia y el Mundo.

  • Política
  • Economía
  • Nacional
  • Internacional
  • Regional
  • Moda y Estilo
  • Corrillos TV
  • Judicial
  • Capitales
  • Entretenimiento
  • Informe
  • Análisis
  • Tendencias
  • Opinión
  • Tecnología

Siganos en nuestras redes sociales

COPYRIGHT © 2023 CORRILLOS SAS NIT. 901671461-9. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin autorización escrita de su titular.

WhatsApp us

¡Bienvenido de nuevo!

Iniciar sesión en su cuenta

Perdido tu contraseña?